Varios profesionales sanitarios se reunieron el pasado viernes en la Fundación Ramón Areces de Madrid para mostrar los avances y los problemas que plantea la cirugía de Mohs en pacientes con carcinoma basocelular.
La cirugía de Mohs es la técnica más eficaz para tratar algunos cánceres de piel, como los carcinomas basocelulares. Sus dos principales objetivos son eliminar completamente tumor y preservar tejido sano.
Este fue el tema principal de la jornada “Cirugía de Mohs en el tratamiento del cáncer de piel”, celebrada el pasado viernes en la Fundación Ramón Areces de Madrid.
Desde un 5 a 30% de tumores pueden volver si se realiza una cirugía estándar. Es decir, la cirugía de Mohs da de 3 a 5 veces mejores resultados que la manera tradicional de extirpar el tumor”, así lo explicaba Pedro Rodríguez-Jiménez, dermatólogo especializado en cirugía de Mohs del Hospital Ruber Internacional.
Durante la presentación, Ricardo Ruiz, director médico dermatólogo de la Clínica Dermatológica Internacional y el Hospital Ruber Internacional, contaba que hace 16 años se hacía la técnica en muy pocos hospitales y que actualmente se realiza hasta en los centros más grandes: “A lo largo de estos años han cambiado muchas cosas, pero hay algo que no ha cambiado y es nuestro agradecimiento a la Fundación Ramón Areces”.
Pese a ello, el doctor Rodríguez-Jiménez insistía en su ponencia que en Estados Unidos se opera con Mohs en la mayoría de estos tumores, algo que en España sigue sin ser tan frecuente: “Es un tema de organización de recursos, no es fácil en la Sanidad pública porque se necesitan varios especialistas. Está claramente infrautilizada”.
Por su parte, Javier Cañueto, jefe de Servicio de Dermatología en la unidad de cáncer de piel de alto riesgo en el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, mostraba el uso de la técnica en los carcinomas escamosos cutáneos y manifestaba que son tumores con riesgo “muy significativo” de recaída: “La cirugía de Mohs es el estándar de tratamiento”.
En el transcurso de la jornada también se habló sobre las zonas de riesgo para los cirujanos, como la órbita de los ojos o los paquetes vasculonerviosos.
Yolanda Delgado, jefa de Sección de Dermatología y de unidad de Cirugía de Mohs en el Hospital Universitario de La Princesa, fue la encargada de exponerlo: “En cirugía oncológica es importante hacer un balance sobre los beneficios y los riesgos.
No debemos olvidar que nuestros objetivos deben ser la extirpación completa del tumor, minimizando los riesgos colaterales.