En un estudio reciente publicado en JAMA Internal Medicine , los investigadores compararon dos formas de métodos de monitoreo del nivel de actividad física (AF), a saber, relojes y contadores de pasos, para evaluar si alguno de ellos se asocia con mejores resultados de salud para las mujeres de 60 años.
Sus resultados, derivados de un estudio de cohorte, indican que las dos estrategias de seguimiento eran similares en cuanto a su relación con las enfermedades cardiovasculares (ECV) y la mortalidad por todas las causas, lo que permitió que las directrices de salud se adaptaran a las preferencias personales en la elección de la métrica.
La salud física es crucial para reducir el riesgo de muerte prematura y enfermedades no transmisibles.
Las directrices de los Estados Unidos publicadas en 2018 recomiendan que los adultos realicen al menos 150 minutos de actividad física aeróbica moderadamente intensa o 75 minutos de actividad física aeróbica vigorosamente intensa por semana, calculados a partir de datos de actividad física autoinformados.
Sin embargo, estas pautas no tienen en cuenta los objetivos de recuento de pasos debido a que no hay pruebas suficientes.
Recientemente ha aumentado el interés en utilizar los pasos diarios como biomarcador de salud, impulsado por los rastreadores de actividad física y los teléfonos inteligentes.
Los estudios indican una relación inversa entre el recuento de pasos y la mortalidad por todas las causas, particularmente significativa entre 6.000 y 8.000 pasos para adultos mayores y entre 8.000 y 10.000 pasos para personas más jóvenes.
También se han observado asociaciones entre un mayor número de pasos y una mejor salud cardiovascular. A pesar de esto, no existen comparaciones directas entre las métricas basadas en pasos y en el tiempo.
Sobre el estudio
Este estudio abordó las lagunas de la investigación comparando las asociaciones de estas métricas con las enfermedades cardiovasculares y la mortalidad por todas las causas.
Planteó la hipótesis de asociaciones similares para ambas métricas, lo que podría respaldar el uso del recuento de pasos como alternativa o complemento a las recomendaciones de AF basadas en el tiempo.
En el estudio participaron participantes del Women’s Health Study, un estudio de cohorte prospectivo en curso que inicialmente evaluó el uso de dosis bajas de vitamina E y aspirina para prevenir enfermedades cardiovasculares y cáncer entre 39.876 mujeres de 45 años o más.