Un nuevo ensayo muestra que la liraglutida ayuda a reducir el IMC en niños de 6 a 12 años con obesidad, pero los efectos secundarios incitan a realizar más estudios
Un estudio reciente publicado en The New England Journal of Medicine y presentado en la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes y la Obesidad (EASD) investigó el uso de liraglutida para reducir la obesidad entre niños de seis a 12 años.
La obesidad es una enfermedad crónica, recurrente y progresiva que suele preceder a la obesidad adolescente y persistir hasta la edad adulta.
Se asocia con enfermedades a largo plazo, como diabetes tipo 2, esteatohepatitis, neoplasias malignas y un riesgo elevado de muerte por enfermedad cardiovascular.
El tratamiento de la obesidad en niños y adolescentes implica cambios en el estilo de vida, como una dieta nutritiva y actividad física frecuente.
Sin embargo, sus beneficios a largo plazo en el índice de masa corporal (IMC) son mínimos, lo que indica la necesidad de intervenciones adicionales, como los fármacos.
No existen medicamentos autorizados para el tratamiento de la obesidad no monogénica y no sindrómica en niños menores de 12 años.
La liraglutida, un análogo del péptido similar al glucagón-1 (GLP-1), reduce el peso en adolescentes y adultos obesos; sin embargo, se desconoce la eficacia y seguridad del medicamento en niños.
Estos medicamentos actúan a nivel central para aumentar la señalización de saciedad, suprimir el apetito y la ingesta de energía y minimizar la recompensa por la comida.
Estos medicamentos también aumentan los niveles de insulina posprandial, disminuyen la secreción de glucagón y prolongan el vaciado del estómago.
El ensayo controlado aleatorio (ECA) de fase 3ª exploró los efectos antiobesidad y la seguridad de la liraglutida entre niños de seis a 12 años.
Los investigadores llevaron a cabo el ensayo SCALE Kids en 23 centros de nueve países entre marzo de 2021 y enero de 2024.
Los valores de IMC de los participantes estaban en el percentil 95 o más según las tablas de crecimiento de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Su desarrollo puberal oscilaba entre las etapas 1 y 5 de Tanner. Ninguno tenía diabetes dependiente de insulina ni otras afecciones relacionadas con la adiposidad.
El ensayo fue aleatorizado 2:1 y los participantes recibieron 3,0 mg de liraglutida una vez al día por vía subcutánea o un placebo con intervenciones en el estilo de vida durante 56 semanas.
El estudio incluyó 26 semanas de seguimiento.
Los investigadores iniciaron el tratamiento con liraglutida 0,6 mg diarios durante una semana para los niños que pesaban ≥45 kg y 0,3 mg diarios para los que pesaban menos.
Aumentaron la dosis en incrementos de 0,6 mg por semana, durante ocho semanas para los niños que pesaban ≥45 kg o diez semanas para los que pesaban menos.
Las intervenciones en el estilo de vida incluyeron asesoramiento dietético por parte de profesionales certificados y una hora diaria de ejercicio físico de intensidad moderada a alta.
El resultado primario fue un cambio porcentual en los valores del IMC. Los resultados secundarios incluyeron un cambio porcentual en el peso y una disminución ≥5,0% en el IMC.
Otros resultados del estudio incluyeron una reducción ≥10% del IMC, cambios en el IMC como porcentajes del percentil 95, cambios en la desviación estándar del IMC y alteraciones en la circunferencia de la cintura, el peso, la hemoglobina glucosilada y la presión arterial.
Las evaluaciones de seguridad comprendieron eventos adversos y eventos adversos graves. Los investigadores utilizaron el análisis de covarianza (ANCOVA) para el análisis estadístico. Las regresiones logísticas determinaron los odds ratios ajustados (AOR) para el análisis.