Ramón Velásquez Gil
Ciertamente, con la llegada de las redes sociales llegó la información al instante, el aprendizaje de muchas cosas sin costo alguno. y también un medio de comercializar y vender.
Hace unos meses atrás y con vista a las realidades de la vida, me puse a investigar los precios de los seguros en el área de exequias, velatorios y entierros en EE.UU.
Ustedes saben, por si las moscas pues ya uno tiene sus añitos y hay que estar prevenido. Bueno, solamente abrí algunas páginas de empresas dedicadas a estos menesteres y estuve viendo servicios, sin llamar ni preguntar a nadie.
Entonces, más o menos una semana más tarde de haber hecho tal revisión; un día, sin previo aviso ni anuncio, se presentaron unos señores a mi casa, en horas en que estaba yo trabajando, queriendo entrevistarse conmigo, para ofrecerme un seguro funerario, pero que tenían que hacerme un chequeo previo, a ver cómo estaba yo ”para poner el precio.”
La arrechera que agarre cuando Carlos me llamo para decirme que esa gente estaba en la casa, fue grande. Cómo carajo se enteraron de que yo estaba interesado en un seguro de esos?. Sencillo, las redes están infiltradas por vendedores de todo tipo de vainas. Bueno, le dije a Carlos que los mandara para el Carrizo, orden que Carlos cumplió en el acto.
Pero esto todavía no es el colmo. Hace una semana me llegó por correo, el cual funciona muy bien aquí, un sobre dirigido a mi persona por una de estas empresas, el cual contenía un cuestionario donde me pedían Responder Una Encuesta, con las preguntas siguientes:
-¿Cuál es su edad actual?. ¿Cuánto tiempo considera usted que le queda por vivir?. ¿Cuáles personas cree que estarán con usted, al momento de su muerte?
Coño, no seguí leyendo más preguntas. Lo único que atiné a pensar fue que, esta gente me estaba sugestionando, a fin de que me cuidara mucho después que tomara la póliza, para que durara mucho tiempo antes de que llegue el día.
Es decir, que me de tiempo de pagar un poco más del costo jejeje. Ah!, el sobre donde venía la encuesta, muy sobrio coloreado de gris y negro.
Muy profesionales de verdad, jejeje. !Zape!.