En los últimos meses varios hijos de famosos han debutado en la industria de la moda. Leni, que en diciembre posaba junto a su madre Heidi Klum para la revista ‘Vogue’; Alexis Olympia, que con solo tres años ha compartido campaña con su madre Serena Williams, y Ella Emhoff, la hijastra de Kamala Harris que desfilado en la semana de la moda de Nueva York y ha presentado su colección de ropa, son solo algunas de la jóvenes que han revolucionado el sector en estas semanas.
La última en sumarse a esta lista es Stella del Carmen, la hija de Antonio Banderas y Melanie Griffith, que a sus 24 años se ha estrenado como modelo para una marca prácticamente desconocida y sin una gota de maquillaje para reivindicar la naturalidad. De esta manera, la joven sigue los pasos de su hermana Dakota Johnson, que en 2009 protagonizó la campaña de Mango.
La firma en cuestión se llama 101% y se ha especializado en dar una segunda vida a tejidos industriales, que recupera de fábricas y océanos para convertir en ropa unisex, de líneas minimalistas y siempre en color negro utilizando la tecnología Econyl®, la misma que o H&M utilizan en sus colecciones sostenibles.
Stella posa en distintas localizaciones de Los Ángeles sin maquillaje ni filtros para el fotógrafo mexicano Joaquín Castillo, con distintas prendas de la marca 101% con base en Ciudad de México.
Puede que la marca no fuera demasiado conocida. Pero eso era antes de que la celebrity de origen marbellí se convirtiera en su imagen de campaña. Con sus miles de seguidores en Instagram, su posición privilegiada en el mundo de Hollywood y esa belleza natural y dulce que la caracteriza, Stella del Carmen ya ha conseguido el objetivo de cualquier anuncio: que todas las miradas se centren en ella.
