El delantero de los New York Red Bulls, Dante Vanzeir, siempre ha comparado la sinopsis de su trabajo, que es marcar goles, con la de una botella de ketchup.
“A veces hay que sacudirlo y no sale”, dijo Vanzeir. “Pero una vez que sale, es todo de golpe. Así es como los delanteros pasan por momentos difíciles”.
Las papas fritas proverbiales de Vanzeir habían estado completamente secas durante partes alarmantes de la temporada.
Con dos goles en sus primeros 10 partidos de la MLS de la temporada 2024, el belga de 26 años pasó 18 partidos sin anotar desde el 11 de mayo hasta el 14 de septiembre.
Los Red Bulls ganaron solo seis de esos partidos, sin Emil Forsberg, que estaba lidiando con una lesión en la parte inferior de la pierna, y Lewis Morgan, quien fue convocado a acción en múltiples ocasiones con el equipo nacional escocés.
A pesar de haber ganado solo tres de sus últimos 18 partidos de la temporada regular y de haber logrado un lugar en los playoffs sin comodín como séptimo clasificado en el Este, los Red Bulls han recuperado su forma de principios de temporada, que los vio ocupar un lugar entre los cuatro primeros en la conferencia durante la primera mitad de la temporada.
Sorprendieron a los campeones defensores de la Copa MLS, el Columbus Crew, con una barrida de dos juegos en la primera ronda.
Luego, ganaron en la primera edición de postemporada del Hudson River Derby al derrotar a un NYCFC que los había vencido dos veces en la temporada regular por un marcador de 2-0.
La victoria le dio a Nueva York el boleto a la final de la Conferencia Este por primera vez en seis años.
Vanzeir ha jugado un papel directo en todo esto. Marcó un gol del empate en el minuto 64 en el segundo partido contra Columbus, que finalmente llevó a la tanda de penales ganada por Nueva York.
Luego, marcó el segundo y último gol de los Red Bulls en la semifinal de la Conferencia Este contra NYCFC en el minuto 24 cuando empujó un balón suelto tras un tiro de esquina al poste derecho y entró.
“Sé que en los playoffs es cuando más importa y trato de dar lo mejor de mí para el equipo. Estoy feliz de poder ayudar al equipo ahora en esos dos partidos con un gol”, dijo Vanzeir. “Pero a veces, también hay que tener suerte y algunos tiros entran y otros no”.
Vanzeir ahora tiene cuatro goles en sus últimos ocho juegos, mientras que su asistencia en el primer gol de Felipe Carballo contra NYCFC elevó su total de temporada a 11 en todas las competiciones, la mayor cantidad de un jugador de los Red Bulls en una sola temporada desde Bradley Wright-Phillips en 2018.
Si alguien tuviera que buscar por qué el juego de Vanzeir ha cambiado como lo ha hecho, hágale saber cuando lo descubra.
“No sé, no tengo una respuesta para eso”, dijo Vanzeir. “Creo que hemos crecido como equipo y, por supuesto, en la temporada hay algunos altibajos. Es normal. Pero creo que lo más importante es simplemente tener fe en uno mismo, incluso en los momentos difíciles”.
En cierto modo, la confianza inquebrantable es un microcosmos de la filosofía de los Red Bulls. Aunque terminaron la temporada regular con una nota preocupante, nunca hubo muchas dudas en el vestuario de que podrían llegar lejos en los playoffs.
“Este es el mejor ejemplo de que uno es responsable de sí mismo”, dijo el entrenador de los Red Bulls, Sandro Schwarz, sobre Vanzeir. “Es bueno ver que tiene esa sensación”.
Los Red Bulls esperan que las buenas sensaciones los acompañen hasta Florida, donde se enfrentarán al Orlando City en la final de la Conferencia Este el sábado.
Esperan llegar a la final de la Copa MLS por primera vez desde 2008.
“Espero que [el gol contra NYCFC] no sea mi último gol de la temporada y pueda ayudar un poco más al equipo”, dijo Vanzeir.
