Los platos voladores de José de Zer

Columnistas
Juan Eduardo Fernández “Juanette”

La existencia de los extraterrestres es algo que siempre ha estado rondando en la opinión pública. Los seres de otro planeta han tenido relación con las noticias desde que Orson Wells hiciera su famosa alocución de La Guerra de los mundos en 1938. Muchos años después, el periodista argentino José de Zer dedicó una serie de reportajes sobre la existencia de extraterrestres en un noticiero de Prime Time. Esta historia, que ya es parte no solo de la historia de la TV en Argentina sino de la cultura pop, ahora salta a la pantalla de la mano de Netflix.

¡Agárrense del sillón! pues “El hombre que amaba los platos voladores» se asemeja a un capítulo de los expedientes X, pero rodado en las sierras de Córdoba. La cinta de Diego Lerman, protagonizada por Leonardo Sbaraglia es una montaña rusa de locura mediática que te hará cuestionarte si el verdadero alienígena es el que está frente a la cámara o detrás de ella.

Imagínate lo siguiente: estás viendo un noticiero típico y de repente el periodista José de Zer, interpretado por Sbaraglia, empieza a hablar de ovnis como si fueran el pronóstico del tiempo. Seguramente te terminarás preguntando: ¿Pero ¿qué es lo que acabo de ver?

La película narra la historia de José, un periodista de espectáculos cuya obsesión por los extraterrestres lo catapulta a la fama. En vísperas de conseguir la «prueba definitiva» que podría cambiar la historia de la humanidad (o al menos su rating), el cronista se embarca junto a su camarógrafo “Chango”, en una cruzada delirante por las sierras cordobesas. Es así como, despojado de toda credibilidad periodística, empieza a fabricar evidencias mientras es perseguido por su propia locura y la sed insaciable de los televidentes por más contenido. 

La cinta explora temas como la manipulación mediática, las fake news y los sacrificios que conlleva la búsqueda de la verdad… o al menos de una buena historia para el prime time. Con un estilo visual que mezcla lo kitsch de los 80 con la paranoia alienígena, El hombre que amaba los platos voladores ha sido aclamada por la crítica por su humor ácido y sus actuaciones, especialmente la de Sbaraglia. Otras participaciones a destacar son las de Mónica Ayos, Osmar Núñez y Norman Briski.

El hombre que amaba los platos voladores explora temas relevantes como la manipulación mediática, las fake news y el poder de la televisión para moldear la opinión pública. A medida que José de Zer fabrica pruebas y convence a lugareños para que respalden sus historias, el espectador se vuelve testigo del nacimiento de la era de la desinformación.

Pero la película de Lerman no juzga a su protagonista, sino que lo presenta como un personaje complejo, dejando que el público decida si es un estafador, un visionario incomprendido o simplemente un hombre perdido en sus propias fantasías.

Un punto a resaltar es la estética visual de la cinta, donde los efectos especiales rudimentarios y las pruebas alienígenas caseras, te harán viajar en el tiempo hasta la época de los TV de tubo, las antenas parabólicas y el VHS.

El final de la película juega con la percepción del espectador. La supuesta abducción de José es comparable a lo que hizo José de Zer a los televidentes del noticiero Nuevediario, cuando logró captar la atención de millones, gracias a sus excéntricos reportajes. 

La película es El hombre que amaba los platos voladores es una cinta acerca del poder de los medios y la naturaleza de la creencia. Puede verse en Netflix desde el 18 de octubre.