Bodegueros de Nueva York se oponen a legalización de la marihuana

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El presidente de la Asociación de Bodegas y Pequeños Negocios del Estado de Nueva York, Ignacio Castillo, se manifestó en contra de la legalización de la marihuana y la intencion de la venta de esa droga en bodegas.

«Nuestro deber es cooperar para que la sociedad se mantenga sana, ofreciendo siempre el mejor servicio a la comunidad que representamos», explicó Castillo en un documento.

Aseguró que «la descomposición social que traerá la legalización de la droga pondrá en peligro las vidas de los bodegueros, ya que cuando los adictos sientan necesidad de consumo y no cuenten con dinero tratarán de adquirirla por medio de la violencia, lo que pondrá en juego la sobrevivencia de nuestros asociados».

Se espera que el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, firme pronto la medida que crea un sistema de regulación para supervisar la industria del cannabis, que abarca desde las operaciones de cultivo masivo hasta los cafés de esquina que permiten fumar y vaporizar marihuana.

El estado anticipa que la venta legal de marihuana para los mayores de 21 años comenzará dentro de un año, mientras acomete la compleja tarea de emitir licencias para negocios de cannabis y prepara para hacer cumplir una larga lista de nuevos estatutos sobre la marihuana.

El sábado pasado los líderes del Senado y la Cámara de Nueva York consiguieron un acuerdo con la oficina del gobernador sobre un plan para legalizar y regular los productos de cannabis.

El acuerdo se alcanzó tras años de discusiones y en momentos en que Cuomo enfrenta varias investigaciones, incluyendo denuncias de nueve mujeres por presunto acoso sexual y el supuesto encubrimiento de muertes en hogares de ancianos por covid-19.

Entre los puntos que se pueden destacar del proyecto de legalización de la marihuana en Nueva York, están:

  • Impone un impuesto estatal del 9% sobre las ventas minoristas de marihuana recreativa y los condados podrían agregar un impuesto adicional del 4%.
  • Se eliminarían las sanciones penales por posesión de menos de tres onzas, y los que tuvieran condenas anteriores verían sus antecedentes borrados automáticamente.
  • Las ciudades podrían optar por no participar en el programa.
  • Se les permitiría a los neoyorkinos cultivar hasta seis plantas por macetas, en interiores o exteriores, y por cada hogar podría haber un máximo de 12 plantas.
  • Conducir bajo los efectos del cannabis podría considerarse como una infracción bajo el concepto de “conducir con discapacidad”, aunque en un grado menor que “conducir en estado de ebriedad”.
  • La legislación crearía una nueva Oficina estatal de Gestión del Cannabis que supervisaría las licencias para cultivadores, distribuidores mayoristas, dispensarios e incluso «sitios de consumo» para adultos.

Por otra parte, en un comunicado, la oficina del gobernador indicó que la legalización podría generar un aumento de 350 millones de dólares en la recaudación fiscal anual del estado y crear decenas de miles de puestos de trabajo.

«Legalizar el cannabis para adultos no busca solo crear un nuevo mercado que proporcione empleos y beneficie a la economía; también pretende dar justicia a comunidades marginadas durante mucho tiempo y garantizar que aquellos que han sido penalizados injustamente en el pasado tengan ahora la oportunidad de beneficiarse», dijo Cuomo en el comunicado.

La propuesta incluye el otorgamiento de créditos y garantías para fomentar la creación de puestos de trabajo y la participación en la industria de pequeños granjeros, mujeres y veteranos de guerra con discapacidades, así como de neoyorquinos de las minorías.

Según el proyecto de ley, parte de los fondos recaudados por impuestos al cannabis se destinarán a un fondo para tratamientos contra la adicción a las drogas y educación.

«Esta legislación histórica trae justicia al estado de Nueva York al poner fin a la prohibición, eliminando los registros de condenas que han reducido las oportunidades de innumerables neoyorquinos predominantemente jóvenes negros y latinos», dijo The Legal Aid Society, un bufete de abogados de justicia social, al celebrar el acuerdo alcanzado para la inminente legalización.

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