Mbappé sufre un esguince leve, nada más. Unos días de reposo, fisioterapia y de vuelta al ruedo… pendiente de evolución. Respiran en Valdebebas y no es para menos: la final de Copa es en sólo ocho días.
Cualquier lesión mayor, incluso un esguince pero de Grado II, habría puesto en peligro su presencia. Pero no. Se apagan las alarmas.
Esta mañana se ha sometido a pruebas y los resultados confirman el optimismo: lo que sufre en el tobillo derecho es un esguince leve. Común. Su presencia en La Cartuja no corre peligro.
Todo sucedió en la recta final de la vuelta contra el Arsenal, a falta de 18 minutos. Kylian fue a disputar un balón con Rice, saltó para esquivarlo y en la caída… torcedura.
Muy fea. Dolorosa. Rápidamente pidió las asistencias médicas, golpeando el césped de rabia. Hizo un intento, pero apenas podía dar dos pasos sin cojear. Y tuvo que marcharse del campo: el Bernabéu lo despidió entre pitos, culmen a una noche pesadillesca.
Nada preocupante
Las primeras exploraciones apuntaron a un esguince leve, pero se decidió dar 48 horas para realizar las pruebas. Es algo habitual: si se consigue reducir la inflamación, las resonancias son más precisas.
Ayer descansó todo el equipo y hoy, en la vuelta al trabajo, Mbappé se ha sometido a las mencionadas pruebas y estas han esclarecido el asunto: esguince leve. Unos días de reposo deportivo, mucha fisioterapia y dentro de poco otra vez jugando. No hay nada preocupante. En el club están tranquilos: La Cartuja no corre peligro
Baja el domingo
En cualquier caso, no iba a poder jugar ante el Athletic, este domingo: cumplirá el partido de sanción por su entrada a Antonio Blanco. Así que Kylian se tomará estos días con calma, recuperándose sin mirar al calendario.
Desde el club se transmite que no está descartado para el Getafe, pero no se tomarán riesgos.