Brett Berard busca dejar huella con Rangers después de primera temporada en la NHL

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A través de una primera temporada completa destacada como profesional, es donde Berard notó más su crecimiento como jugador.

“Creo que la confianza es algo importante en lo que trato de trabajar”, dijo Berard el miércoles después del tercer día del campo de entrenamiento de desarrollo de prospectos de los Rangers .

“Eso es algo en lo que todos deberían tratar de trabajar… Es mi primer año completo como profesional, este es mi tercer campo de entrenamiento [de desarrollo de jugadores], y al venir aquí definitivamente te sientes más cómodo con el personal, los jugadores. Es muy divertido”

Una selección de quinta ronda en 2020 (No. 134), el joven de 21 años está tocando a la puerta para formar parte del roster de los Rangers el próximo año después de brillar con AHL Hartford la temporada pasada.

Lideró al Wolf Pack en anotaciones con 25 goles y agregó 23 asistencias para terminar con 48 puntos, empatado en el tercer lugar más alto del equipo.

Después de jugar tres temporadas en Providence, fue su primera acción real con la organización, aparte de jugar en tres partidos con Hartford el año anterior.

Sumado al hecho de que los Rangers han dejado que los delanteros Barclay Goodrow, Jack Roslovic y Alex Wennberg se vayan como agentes libres y acaban de contratar a Reilly Smith y Sam Carrick, Berard tiene una verdadera oportunidad.

“Trabajó muchísimo el verano pasado”, dijo el martes Jed Ortmeyer, director de desarrollo de jugadores de los Rangers. “El año anterior, cuando llegó a Hartford, se dio cuenta de lo que iba a pasar. Eso lo motivó mucho durante el verano y llegó preparado al campamento. Tuvo una gran temporada y estamos ansiosos por seguir trabajando con él y ver cómo puede hacerlo”.

Un velocista que mide 5 pies 9 pulgadas y pesa 174 libras, la fisicalidad del nivel profesional fue un ajuste para Berard.

Pero una vez más, volvió a su respuesta favorita.

“Obviamente, fue muy diferente a la universidad”, dijo Berard. “Jugamos 84 u 85 partidos; en la universidad, creo que el máximo que jugué fueron 36, así que fue un gran cambio… Hubo algunos desafíos físicos, pero creo que eso también se refleja en la confianza. Si logras superarlos, te preparas para el futuro”.

Berard, una selección baja del draft, apareció y dominó el año pasado en Hartford de alguna manera de forma inesperada.

Bérard, una vez más, supo exactamente a qué atribuir el mérito.

“Diría que me sorprendí un poco, pero no tanto. Creo que tengo confianza en mí mismo como jugador”, dijo Berard. “No es realmente mi objetivo entrar y liderar al equipo en anotaciones”, dijo Berard. “Es entrar y simplemente desarrollar mi juego, y luego, pase lo que pase, pasará. Tuve la suerte de ver el disco entrar en la red. Recuperar la confianza de nuevo ayuda a fortalecerla”.