Una victoria dominante sobre los Milwaukee Bucks el viernes por la noche en el Garden permitió que los Knicks volvieran a tener un récord de .500 tras ocho partidos en la temporada.
También mostró un juego sólido de su nueva estrella, el pívot Karl-Anthony Towns. Towns tuvo otro duelo de anotaciones que comenzó desde el principio.
Anotó los primeros seis puntos de los Knicks con dos tiros desde la línea de tres puntos y finalmente acumuló 13 puntos solo en el primer cuarto.
El pívot de los Bucks, Brook Lopez, tuvo problemas para contener a Towns, dejándolo abierto en la cobertura para tirar desde el perímetro. Towns lidera la NBA en la mayor cantidad de triples anotados por un pívot hasta el momento, con 20.
El pívot de los Knicks también utilizó su velocidad muchas veces durante el partido para superar a López y anotar con facilidad cerca del aro.
Al final de la primera mitad, Towns ya tenía 27 puntos, liderando el camino para los Knicks, que ganaban 66-47 al final del segundo cuarto.
Con una cómoda ventaja, Towns sólo jugó diez minutos en la segunda mitad del partido y anotó cinco puntos más, totalizando 32. Además, tuvo 11 rebotes y 5 asistencias.
De cara al enfrentamiento del domingo por la noche con los Indiana Pacers en Indianápolis, los Knicks buscaban otro esfuerzo completo como el que disfrutaron el viernes por la noche.
El escolta Mikal Bridges anotó 17 puntos el viernes por la noche contra los Bucks, mientras que el alero OG Anunoby agregó 14 puntos y 6 rebotes.
El alero Josh Hart anotó solo 11 puntos, pero tuvo un impacto notable en el juego, capturando nueve rebotes y siete asistencias.
El equipo anunció después del juego que el esfuerzo del viernes por la noche marcó el séptimo juego consecutivo en el que los cinco titulares anotaron en dos dígitos, un récord de la franquicia.
Al principio de la temporada 2024-25, los Knicks se han enfrentado a una batalla cuesta arriba para intentar descifrar su esquema ofensivo con la incorporación de nuevos jugadores a la alineación esta temporada, pero es evidente que hay mucho talento en este equipo.
La actuación del viernes contra Milwaukee pareció ser una señal de que el equipo del entrenador Tom Thibodeau está empezando a cuajar y podría convertirse en un gigante ofensivo.