Enseñanza de arte salva a pequeños migrantes en NY

Educación

Cientos de familias inmigrantes fueron transportados en buses aquí desde Texas en los últimos meses. Y entre los recién llegados, muchos son niños que, una vez que ingresaron al sistema escolar de la ciudad, se enfrentan al desconocimiento del idioma y al impacto que significa el cambio de vida en una sociedad diferente.

Cuarenta y cinco años después de su fundación, su acción nunca pudo ser más relevante como ahora en que las escuelas de Nueva York están colapsadas por niños con la necesidad de aprender inglés y de ajustarse socialmente.

Se trata del programa Studio in a School, iniciativa que fomenta el desarrollo creativo e intelectual de los estudiantes a través del arte y cuyo contenido se ajusta al perfil de los inmigrantes, aquellos con antecedentes de pobreza y de abuso.

Si bien el sistema escolar de la ciudad de Nueva York es el más grande y diverso de la nación, cifras del Departamento de Educación establecen que más del 61% de los estudiantes de inglés son hispanohablantes. Con los recién llegados, en la mayoría venezolanos y de otros países latinoamericanos, esa estadística ha aumentado, dando lugar a la necesidad de más profesores especializados en la enseñanza multilingüe.

Para Alexei Nichols, directora de la Escuela Pública 340 de El Bronx, el programa es esencial porque logra equidad y que los estudiantes respondan a las necesidades de diferentes culturas y está ayudando en gran medida a encarar la nueva crisis migratoria.

“Abre una puerta diferente para atraer a los niños a la escuela y los conecta social o emocionalmente, lo que les ayuda a tener éxito no solamente en la escuela sino también en la sociedad”.

En estos momentos, Studio in a School, resulta una especie de programa de inmersión para los estudiantes recién llegados. El programa combina las capacidades de tres profesionales: el maestro del aula, el que les imparte inglés como segundo idioma y el profesor de arte, quienes han desarrollado un currículo de aprendizaje que hace que los niños desarrollen la autoestima, se advierte que hacen sus actividades en medio de sonrisas, están seguros y creen en ellos mismos, explicó Nichols.

“Es un trabajo de equipo entre nuestros maestros y los expertos de Studio in a School, los que contribuyen al desarrollo del lenguaje académico ya sea de forma oral o en escritura. Gracias a programas como este, los estudiantes que vienen de todas partes del mundo, tienen un acceso más acelerado al aprendizaje”.

Agregó la directora que el aprendizaje de nuevo vocabulario en el programa de arte lo pueden aplicar en estudios sociales, ciencias, matemáticas y en otras áreas académicas. Por ejemplo, la Escuela 340 pone especial énfasis en el NYSESLAT (New York State English as a Second Language Achievement Test) que es la evaluación que hace el estado para determinar el nivel de desarrollo del lenguaje para estudiantes que están aprendiendo inglés como segundo idioma. Uno de los impactos que tiene el programa Studio in a School, es que los estudiantes están teniendo mejor rendimiento en la parte oral, de escribir y de otros procesos secuenciales.

Al momento, 135 estudiantes de los grados 6, 7 y 8 reciben clases de arte de Studio in a School. La escuela 340 fue seleccionada en 2018 para iniciar el programa piloto en artes y a la fecha, 10 escuelas a través de los cinco condados de la ciudad se benefician de esta iniciativa.

Según Ana Henríquez, asistente de la directora, el resultado es de enriquecimiento en la estrategia de aprendizaje que se complementa con talleres en los diferentes grados, donde también se benefician los estudiantes que están bajo un régimen de educación especial y que al mismo tiempo están aprendiendo inglés como segundo idioma en clases regulares.