Al estilo de Greg Abott, el gobernador de Florida ha empezado a mandar por aire a decenas de inmigrantes a ciudades santuario con el fin de obligar a los estados demócratas a lidiar con los problemas de la red de seguridad social.
No solo el gobernador de Texas, Greg Abott, ha enviado inmigrantes a ciudades santuario,el gobernador de Florida, Ron DeSantis ya ha hecho lo propio, pero vía área.
“Florida puede confirmar que los dos aviones con inmigrantes que llegaron hoy a Martha’s Vineyard eran parte del programa de reubicación del estado para transportar inmigrantes indocumentados a destinos santuario”, dijo Ron DeSantis a través de un comunicado.
“No hubo una notificación previa a nadie en Martha’s Vineyard ni en Massachusetts de que estos inmigrantes llegarían, de la que yo sepa”, declaró Julian Cyr, senador demócrata de Massachusetts
“Estados como Massachusetts, Nueva York y California facilitarán mejor el cuidado de estas personas a las que han invitado a nuestro país al incentivar la inmigración a través de su designación como estados santuario y el apoyo a la apertura de la Administración Biden políticas fronterizas”, dijo Taryn Fenske, directora de comunicaciones de DeSantis al medio antes citado.
La oficina de DeSantis dijo que los inmigrantes podrían ser enviados a “estados progresistas cuyos gobernadores respaldan violaciones flagrantes de la ley federal de inmigración“, y que los floridanos no deberían ser responsables de subsidiar los costos de vida de los inmigrantes.
En tanto, el portavoz del gobernador de Massachusetts, Charlie Baker, Terry MacCormack, señaló a través de un comunicado de prensa que se encontraba en contacto con los funcionarios locales con respecto a la llegada de inmigrantes a Martha’s Vineyard.
“En este momento, los servicios de refugio a corto plazo están siendo proporcionados por funcionarios locales y la Administración continuará apoyando esos esfuerzos”, agregó MacCormack.
La legislatura de Florida asignó $12 millones para implementar un programa que facilite el traslado de inmigrantes a ciudades santuario.
Por su parte, Texas ha transportado en autobús a más de 7600 inmigrantes; los destinos de los inmigrantes son Chicago, Nueva York y Washington D.C. y ha gastado alrededor de $12 millones en enviar inmigrantes a otros estados, es decir, alrededor de $1,300 por migrante, según El Paso Times.
