Tras semanas de conflicto entre Amtrak y Long Island Raid Road (LIRR), el cierre total de un túnel ferroviario del East River comenzará el viernes por la noche como parte de un proyecto de rehabilitación de tres años.
Los funcionarios de Amtrak y LIRR han discrepado sobre la logística de las extensas reparaciones que se realizarán en los tubos del túnel que utilizan ambas líneas ferroviarias.
Amtrak ha insistido en que el cierre total de dos tubos clave en el túnel del East River es necesario para realizar reparaciones críticas de la infraestructura, gran parte de las cuales incluyen los daños causados por el huracán Sandy en 2012.
Sin embargo, la dirección de LIRR ha mantenido que un cierre total, que duraría tres años, podría provocar interrupciones «catastróficas» del servicio para los trenes de LIRR, que dependen de los tubos del East River para llegar a Penn Station. Los funcionarios indicaron que el trabajo podría realizarse con un cierre parcial del túnel.
Sin embargo, tras una reunión informal con la gobernadora Kathy Hochul el día antes del inicio de las prolongadas obras, el plan de Amtrak resultó vencedor, aunque con algunas salvedades.
“Amtrak ha acordado proporcionar inspecciones mejoradas, personal adicional para turnos y el desarrollo de un plan de respuesta operativa para ayudar a mitigar el posible impacto en los pasajeros durante la duración del proyecto”, declaró Hochul. “Si bien sigo creyendo que este trabajo podría completarse sin un cierre total, comprendo la importancia de avanzar con este proyecto”.
Análisis del proyecto de Amtrak
El túnel del East River cuenta con cuatro vías. La renovación implicará el cierre completo y consecutivo de dos de ellas, que permanecerán en funcionamiento durante aproximadamente 13 meses cada una. La primera, la Línea 2, quedará completamente fuera de servicio a partir del 23 de mayo, mientras que la otra, la Línea 1, será utilizada exclusivamente por Amtrak y NJ Transit.
“Esto incluye nuestro plan detallado para brindar cobertura de ingeniería las 24 horas durante la interrupción, inspecciones más frecuentes según lo permita el acceso a las vías, equipos de rescate estratégicamente ubicados y más”, declaró un portavoz de Amtrak. “Junto con LIRR y NJ Transit, supervisaremos de cerca el servicio durante la construcción y, de ser necesario, modificaremos el plan para garantizar la confiabilidad del servicio de pasajeros mientras se repara esta infraestructura crítica”.
Mientras tanto, los trabajadores de Amtrak realizaron una prueba de servicio del cierre del metro el jueves por la mañana para garantizar que no hubiera problemas con el servicio de las líneas ferroviarias.
“Es importante para todos nosotros que este proyecto sea un éxito para que todos los pasajeros, incluidos los residentes y viajeros de Long Island y el norte del estado de Nueva York, sigan disfrutando de un servicio sólido, confiable y puntual ahora y en el futuro”, declaró el portavoz de Amtrak.