Mi amor por la fotografía es inmenso pero no se nada de planos, composición, ángulos o balance de blancos, por suerte tengo una hermana que toma unas fotografías increíbles y un esposo que estudio fotografía.
Soy consciente de la importancia de las fotos como herramienta de comunicación y respaldo de nuestra propia memoria.
Pienso que la fotografía principalmente es como una manera de desahogarse o transmitir sentimientos muy intensos (buenos o malos) un desahogo maravilloso.
Mis favoritas son las fotografías arquitectónicas y los retratos, paisajes e incluso productos para publicidad.
Tal vez muchos de ustedes estén en ese punto en el que yo me encuentro desde hace varios años tratando de buscar mi lugar dentro de este arte y necesiten una guía para saber por dónde comenzar.
Podría decirles simplemente que le tomen fotos a cualquier cosa que vean a su alrededor, todo tipo de objetos y seres vivos, en interiores y exteriores, quietos o en movimiento, hasta que consigan su resultado ideal, pero para ser un poco más organizados, hoy les traigo una mejor recomendación.
Se trata de un recorrido fotográfico “a lo largo de las calzadas oriental y occidental del histórico embalse de Ridgewood” que se realiza de 10 a 11:30 am.
El objetivo es capturar preciosas imágenes del follaje otoñal que me resulta tan mágico y, por supuesto, aprender y divertirse en el proceso.
Espero que esta haya sido otra gran recomendación.
¿Tomarán esta idea?