Desde hace años que la lactancia materna en los países en desarrollo salva vidas, en parte porque es posible que no haya agua limpia disponible para mezclar con la fórmula infantil. Sin embargo, hay muy pocos datos sobre el efecto de la lactancia materna en las muertes infantiles en los países desarrollados.
Un estudio publicado en octubre es el primer informe nacional que evalúa si la lactancia materna reduce la mortalidad infantil en los Estados Unidos. Los investigadores dirigidos por el personal de DNPAO analizaron datos de más de 3 millones de bebés estadounidenses nacidos en 2017. Para los bebés de 7 a 364 días, el inicio de la lactancia materna redujo el riesgo de muerte infantil en general en un 26%. La reducción de la muerte infantil fue del 40% para los niños de 7 a 27 días. El efecto protector se encontró entre la mayoría de los grupos raciales y étnicos.
Otro proyecto liderado por DNPAO resultó en datos a nivel de condado sobre el inicio de la lactancia materna entre los bebés nacidos en 2018 y 2019. Usando la residencia de la madre, no el lugar de nacimiento, el inicio de la lactancia materna por condado varió del 22% a más del 90%. Las tasas de iniciación a la lactancia materna varían ampliamente dentro de los estados. Estos datos se obtuvieron de certificados de nacimiento y se publicaron en línea en noviembre.
