El próximo 16 de julio se cumplen 20 años de la muerte de Celia Cruz (1925-2003), fecha en que el cementerio de Woodlawn en el Bronx, Nueva York, abrirá al público las puertas del mausoleo donde reposan los restos de la Guarachera de Cuba.
La bóveda donde está enterrada la icónica artista cubana, junto a su esposo, el trompetista Pedro Knight, estará abierta desde las 10 de la mañana hasta las dos de la tarde de ese día, para que sus seguidores puedan rendirle tributo, según informó Barbara Selesky, portavoz del camposanto neoyorquino.
Ese día, como ha sucedido en años anteriores, se escuchará la música de la Reina de la Salsa en el mausoleo, precisó la fuente.
Los seguidores de la estrella, que murió el 16 de julio de 2003 tras perder su batalla contra el cáncer, podrán rendir tributo a la «Guarachera de Cuba» entre diez de la mañana y dos de la tarde, indicó Barbara Selesky, portavoz del Woodlawn, donde la exestrella de Fania descansa junto a su esposo, el trompetista Pedro Knight, que murió en 2007.
De acuerdo con Selesky, y como ha ocurrido en años anteriores, ese día habrá música de Celia Cruz en el mausoleo.
La tumba Celia es una de las más visitadas en Woodlawn, donde también descansan numerosas personalidades de las artes, la política, los deportes y otros ámbitos.
La tumba de la intérprete de «La vida es un carnaval» figura entre las más visitadas del Woodlawn, que alberga unos 1,400 majestuosos mausoleos privados y es la última morada de muchos famosos de la música, literatura, la política, deportes o los negocios.
Selesky indicó además que quienes acudan al Woodlawn en auto privado podrán conducir desde cualquiera de las dos entradas del cementerio hasta el mausoleo de la artista.
El 16 de julio el tradicional desfile cubano de Nueva York, que partirá al mediodía desde la calle 38 y la avenida Madison en Manhattan estará también dedicado a la famosa cantante.
Brevemente sobre Celia
Nacida en el barrio de Santo Suárez, en La Habana, el 21 de octubre de 1925, Celia de la Caridad Cruz Alfonso falleció el 16 de julio de 2033, a los 77 años, a causa de un cáncer, en su casa de Fort Lee, Nueva Jersey, Estados Unidos.
Nunca regresó a Cuba después de su partida, en 1960, a un exilio que se prolongó por los restantes 43 años de su vida; aunque en 1990 visitó la Base Naval de Guantánamo, donde tomó un puñado de tierra para llevarlo consigo a Nueva York.
Celia es una de las artistas más populares y trascendentes del siglo XX, una de las más influyentes de la música cubana y un ícono de la música latina.
La revista Rolling Stone la seleccionó este año entre los 20 mejores cantantes de todos los tiempos y exaltó “su tono rico e inimitable”, “inagotable carisma” y “poderosa fuerza vocal”. Sin importar con quién actuara, subrayó la publicación, “Cruz siempre brillaba con luz propia, su magia estaba ligada a su capacidad para hacer sentir a la gente: Podía captar la nostalgia y la añoranza, o podía gritar ‘¡Azúcar!’ y encarnar la exuberancia por la vida”.
La imagen de la legendaria artista de Cuba quedará perpetuada en una moneda oficial de Estados Unidos para 2024.