Carrie Bradshaw vuelve a lucir el icónico vestido de novia en la segunda temporada de ‘And just like that

La casita Trendy

En estos momentos se está grabando la segunda temporada de ‘And Just Like That’, marcando el regreso de uno de los personajes más estilosos en la historia de la televisión, Carrie Bradshaw. Esta serie es la continuación de la saga de ‘Sex and the City’, estrenada hace más de veinte años.

La primera entrega del spin off estrenó en diciembre del año pasado y ahora que se sabe que la segunda está en camino, muchos están deseosos de conocer los detalles, es poco lo que se conoce, pero los paparazzi ya han hecho de las suyas intentando averiguar que es lo que el personaje de Sarah Jessica Parker usará en esta ocasión.

Y es que la moda siempre ha sido la otra gran protagonista de la serie que encumbró (aún más) los manolos o el bolso Birkin de Hermès entre otros iconos. Esto no significa que los estilismos de Carrie Bradshaw hayan estado exentos de polémica: desde el (hoy viral) bolso paloma al vestido de periódicos de John Galliano, hay quien ha cuestionado algunas elecciones que los directores de vestuario (Patricia Field primero y Molly Rogers y Danny Santiago ahora) han tomado para el personaje. 

Seguramente, ningún look ha polarizado tanto a los espectadores de Sexo en Nueva York como el vestido de novia que Carrie llevó a su (fallida) primera boda con Mr Big en la primera película, allá poor el año 2008. 

Si bien no a todos los fans de la serie les convenció, la industria de la moda siempre consideró que el traje nupcial diseñado por Vivienne Westwood para su colección Otoño-Invierno 2007 es uno de los mejores vestidos de novia de la historia del cine.

Sin mangas, con corsé y falda abullonada y de proporciones colosales gracias a su superposición de capas, el vestido estará por siempre asociado al personaje… Y más ahora que, quince años después, Carrie Bradshaw ha vuelto a llevarlo, si bien hasta que no se estrene la serie no podremos saber en qué contexto.

Sí que sabemos que los accesorios con los que se ha combinado han cambiado ligeramente los accesorios. Si hace tres lustros (en la imagen que hay sobre estas líneas) el velo era de considerables dimensiones, hoy es mucho más discreto y de rejilla. En 2008 lo llevó con unas sandalias de gladiador de Dior, y hoy, con unos zapatos de tacón en turquesa de tejido satinado y sin talón. En el mismo tono verdoso, la hoy viuda lleva una enorme capa y unos guantes de ópera a juego. En lo que sí coinciden ambos looks es en le tocado, realizado con grandes plumas también en color turquesa.