El “hype” ya no está en las calles ni en las compañías, se mudó a TikTok

Espectáculo

La danza moderna nació como una forma de rechazar las normas estrictas del ballet, para poder moverse más libremente y expresarse con el cuerpo. Fue un cambio de paradigma que nació en el siglo XIX pero no se popularizó hasta mediados del siglo XX. 

Un cambio de normas que acabaron con el hasta entonces reinado del ballet clásico y que demostró que la danza es mucho más que una técnica perfecta, es también un reflejo de la sociedad. Por eso llegaron luego los bailes callejeros como el break dance. Por eso, si ahora hablamos de nuevos estilos de baile tenemos que pasar de las calles a las redes sociales, específicamente, a TikTok.

La plataforma pegó el salto cuando empezó la cuarentena por la pandemia del coronavirus. De ser una red social que cobraba cada día más relevancia pasó a ser la más famosa por los vídeos de bromas, canciones y, sobre todo, bailes. Personas jóvenes o más mayores, más o menos famosos. Todo el mundo se subió al carro de los bailes: se aprendían la misma coreografía, con la misma canción. El hype no ha bajado aunque ya no estemos en cuarentena pero algunas coreografías son un poco más complicadas. Tanto que las clases de baile de TikTok son la mejor opción para no quedarse atrás.

Al no poder reabrir las academias de danza, algunas de ellas han añadido una nueva modalidad en sus clases y han organizado clases centradas específicamente en bailes de TikTok.

Las clases de baile de TikTok es una nueva forma de expresarse con la danza que responde a una moda, en este caso, el auge de esta plataforma. Seguramente algunas mentes conservadoras del ballet clásico no considerarán estas clases un estilo de baile y reclamarán profesionalización.

Lo mismo ocurrió cuando se hizo famoso el break dance y en otras muchas ocasiones en las que el baile ha avanzado conforme lo ha ido haciendo la sociedad. TikTok no ha roto ningún esquema en este sentido, sobre todo si ponemos a su lado a Michael Jackson. Recordemos Thriller, el videoclip más famoso de la historia de la música que marcó un antes y un después en el mundo de la música. Por su puesta en escena, pero más todavía por el baile que acabó conquistando las pistas de baile de todo el mundo.

Ese movimiento de cabeza y hombros que llegó a todo el mundo y que ayudó a que miles de personas empezaran a aprender una coreografía por primera vez en su vida. Todavía hay tutoriales en YouTube para aprender los pasos de Thriller pero en 1983, cuando se estrenó el videoclip, las clases eran entre amigos o en academias. 

Suena a cuarentena

La cuarentena ha sido el ecosistema perfecto para lanzar los bailes de TikTok al estrellato. «Cruzar los brazos y el derecho lo movemos de arriba hacia abajo». Así empieza la coreografía de la canción Savage que millones de personas han bailado en la plataforma y que muchos otros han enseñado en tutoriales de YouTube. Toosie Slide de Drake, La Tusa o Say So de Doja Cat son otras de las canciones que nada más ponerlas, recuerdan a esos tiempos en los que no podíamos salir de casa por culpa de coronavirus. 

TikTok tiene un gran poder sobre sus usuarios porque ha conseguido crear un propio lenguaje para ellos y, sobre todo, un ritmo que todos siguen y que consigue unirlos a todos. El fenómeno es especialmente interesante en adolescentes, que son la comunidad más grande de la plataforma aunque también tiene un trasfondo aspiracional para los que no lo son tanto.

A causa del confinamiento, la red social ha sido el ecosistema para que los adolescentes se relacionen en un momento en el que no podían hacerlo de otra forma. En ese contexto, los bailes han sido también un aliado para la salud mental. Según una investigación de 2005 publicada en la revista International Journal of Neuroscience, la llamada terapia de movimientos de baile (DMT, por sus siglas en inglés) en adolescentes con depresión leve disminuye los niveles de dopamina y aumenta los de serotonina, mejorando así el estado de ánimo y regulando el estrés.

Los bailes de Tiktok han traspasado las pantallas y han llegado a las academias de danza como un estilo más. Igual que el break dance pasó de las calles a las escuelas o que la coreografía de Thriller fue más allá de un videoclip. Pero el baile no es lo único que ha TikTok ha llevado de la pantalla a la vida real y los vídeos, más allá de las bromas, también han sido el canal para difundir ideas políticas o movimientos como el feminista o críticas contra Donald Trump.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *