Flor de calabaza frita

Sabores

Te damos la bienvenida a tu espacio Sabores. Hoy les mostraremos la preparación de este delicioso aperitivo

Ingredientes

  • 50 g de harina de trigo
  • 50 g de almidón de maíz (maicena)
  • Sal
  • ½ cucharadita de bicarbonato o levadura química
  • Agua con gas o cerveza
  • 12 flores de calabaza o de calabacín
  • Aceite para freír

Procedimiento 

Para empezar, en un bol mezclamos 50 g de harina de trigo, 50 g de almidón de maíz, 1 pizca de sal y ½ cucharadita de bicarbonato o levadura química. Luego, incorporamos poco a poco agua con gas o cerveza, mezclando constantemente hasta obtener una masa homogénea y sin grumos. La consistencia debe ser como de una masa para crepes, ni muy líquida ni muy espesa. Cuando la tengamos, la dejamos en la nevera al menos 30 minutos, aunque 1 hora sería lo ideal.

Mientras la masa está descansando, vamos a preparar 12 flores de calabaza o, como hemos dicho, de calabacín en nuestro caso. Para ello, cortamos el tallo dejando solo un trocito del mismo que nos servirá para manipularlas más fácilmente. Retiramos también las hojas en punta (sépalos) y, con mucho cuidado, abrimos un poco la flor y extraemos el pistilo del interior. Es importante hacerlo con delicadeza para no romper las flores.

Pasado el tiempo de reposo y con nuestras flores listas, pasamos a la fritura. Primero ponemos abundante aceite para freír a calentar. Debe estar bien caliente pero sin que llegue a humear. Ahora, una a una sumergimos las flores en la masa, asegurándonos de que queden bien cubiertas, y dejamos que escurra el exceso de masa para que el rebozado quede uniforme y con solo una fina capa.

Acto seguido, pasamos las flores a la sartén con el aceite y las freímos hasta que estén doradas, dándoles la vuelta si es necesario para que se doren de forma uniforme. Haremos la fritura por tandas para que el aceite no pierda temperatura y nos permita que se doren rápido sin absorber demasiado aceite.

En cuanto las flores estén doradas y crujientes, las sacamos y las dejamos reposar sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Antes de servirlas, espolvoreamos un poco de sal por encima. Procuraremos servirlas enseguida para poder disfrutarlas bien calientes y crujientes.