El gobierno del presidente Joe Biden anunció este viernes una asignación de fondos por un total de $640 millones de dólares para programas destinados a organizaciones comunitarias que brindan alojamiento y otros servicios a migrantes recién llegados en todo el país.
Según un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional, una primera partida de $275 millones de dólares se distribuirá de inmediato para el programa de Alojamiento y Servicios por Asignaciones.
Además, se asignarán otros $25 millones de dólares antes del término del período fiscal 2024 el 30 de septiembre, para adaptarse a las necesidades en evolución, publicó la agencia de noticias EFE.
Estos fondos, dirigidos a 55 organizaciones, estarán destinados al alojamiento temporal y otros costos relacionados con los solicitantes de asilo mientras esperan el resultado de sus trámites ante las autoridades de inmigración.
Además, el Departamento de Seguridad Nacional entregará $340,9 millones de dólares para el Programa Competitivo de Alojamiento y Servicios, que se asignarán antes del término del período fiscal.
Según el DHS, en el período fiscal 2023 se donaron más de 780 millones de dólares a organizaciones y ciudades en todo el país para mejorar el acceso de los extranjeros a permisos de trabajo y la ayuda temporal durante sus procesos migratorios.
Estas asignaciones de fondos, autorizadas por el Congreso, serán canalizadas a través de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras y la Administración de Gestión de Emergencias, que dependen del Departamento de Seguridad Nacional.
El comunicado también destacó que entre el 12 de mayo de 2023 y el 3 de abril de 2024, el Departamento de Seguridad Nacional había deportado o devuelto a sus países a más de 660,000
personas que, en su mayoría, habían cruzado la frontera suroeste de Estados Unidos.
El secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, responsable de la política migratoria del país, reconoció el miércoles que la frontera con México atraviesa una “crisis”, aunque subrayó que la responsabilidad de resolver el problema recae en el Congreso, publicó EFE.
Mayorkas compareció en dos audiencias ante la Cámara de Representantes y el Senado para presentar los presupuestos del Departamento de Seguridad Nacional para el año 2025.
Estas comparecencias coincidieron con el juicio político impulsado en febrero por la Cámara Baja, de mayoría republicana, por su gestión de la política fronteriza, el cual debe pasar por el Senado, controlado por los demócratas.
Criticó asimismo la negativa del Congreso en febrero de aprobar un proyecto de ley negociado por
senadores demócratas y republicanos que buscaba fortalecer la política fronteriza. Destacó que “solo el Congreso puede arreglar nuestro sistema roto y obsoleto”.
El Partido Republicano, liderado por el expresidente Donald Trump, ha centrado su campaña en la cuestión migratoria, acusando a Biden de tener las “fronteras abiertas”.
La administración Joe Biden ha revertido algunas políticas migratorias de Trump, como facilitar las
devoluciones de migrantes en caliente y ha implementado programas de permisos humanitarios, al
tiempo que ha restringido las solicitudes de asilo en la frontera.
En diciembre del año pasado, se registraron más de 300,000 cruces irregulares en la frontera con México, una cifra histórica.
Mayorkas afirmó en ambas audiencias del miércoles que el gobierno ha deportado a más de 630,000 personas en el último año.