Luis Echeverría, asesino brutal, murió dulcemente a los 100 años, en su hogar

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Recordar que en México hubo una matanza brutal, el de octubre de 1968, cuando el Batallón Olimpia, disparó contra los estudiantes que protestaban en la Plaza de las Tres Culturas, con un saldo de aproximadamente 400 muertes ( el gobierno sólo reconoció 40), y lo que se ha llamado en libros, canciones y películas,  la Masacre de Tlatelolco; y sacar del olvido que el 10 de junio de 1971, alrededor de la normal de maestros, cuando los estudiantes de la ciudad de México salieron a las calles en apoyo a los estudiantes de Nuevo León en lucha, se produjo otra masacre, con número indeterminado de víctimas.

Y lo más asombroso de todo esto, es que el principal responsable de estos crímenes, además de culpable de la más grande crisis económica que haya tenido México, pues estuvo siempre en el poder, desde 1958( Subsecretario de Gobernación), hasta la presidencia que ejerció, desde el 1º de diciembre de 1970, hasta el 30 de noviembre de 1976, muriera  beatifícamente en su hogar este  9 de julio de 2022

Luis Echeverría, un cínico con todo el poder

Luis Echeverría, abogado, nacido en Ciudad de México, el 17 de enero de 1922, puede considerarse como el más típico político de lo que significa un solo partido, ejerciendo la presidencia del país, como lo fue el PRI, durante tantos años en la vida de México

Licenciado en derecho por la Escuela Nacional de Jurisprudencia, en 1946 inició su carrera política como secretario particular del presidente del PRIRodolfo Sánchez Taboada. En diciembre de 1958 fue nombrado subsecretario de Gobernación; llegó a suceder al titular Gustavo Díaz Ordaz en 1963 y permaneció en la secretaría hasta 1969 cuando el partido lo postuló a la presidencia de la República, en la que se mantuvo, como señalamos hasta 1976.

Todavía, incansable de poder,el 16 de mayo de 1977 Echeverría fue designado por el presidente mexicano José López Portillo como embajador extraordinario y plenipotenciario de México en misión especial este encargo le permitió representar a su país ante la UNESCO y ante Australia y Nueva Zelanda hasta que dejó dicho cargo en 1979.

Represión para acallar la protesta popular

Luis Echeverría es en cierto modo creador de esa política que ahora se llama populismo, socialismo del siglo XXI, y otras monsergas utilizadas por Hugo Chávez y Maduro en Venezuela, Daniel Ortega en Nicaragua o Díaz Canel en Cuba.

Mientras perseguía con asesinatos, desapariciones o prisión a los estudiantes y obreros que protestaban contra el hambre, la devaluación más espantosa o la desnutrición, internacionalmete apoyaba la revolución cubana y recibía al presidente chileno Salvador Allende

Pero tenía tanta doblez que se le acusaba de ser 

informante de la CIA. Se dijo que no paraba de vanagloriarse como un revolucionario. Criticaba al imperialismo norteamericano a la par que colaboraba de manera sádica en su guerra contra el comunismo.

Acusado de genocidio y desaparición de opositores

A este vivaz personaje, la Fiscalía mexicana le acusó, junto a Gustavo Díaz Ordaz, quien era Gobernador, de fraguar la masacre de Tlatelolco. Debe apuntarse que el propio Echeverría, quien entonces era Subsecretario de la Gobernación, admitió que él personalmente pidió la intervención del ejército. Declarado culpable se le impuso una prisión domiciliaria

De esa manera se convirtió en el primer expresidente mexicano en recibir dos órdenes de aprehensión por presunto genocidio, cumplir una prisión domiciliaria y finalmente ser absuelto de toda responsabilidad en 2009.

Sin justicia, ni humana ni divina

Este monstruo, para calificarlo de alguna manera, terminó ayer su existir, tranquilamente en su casa de Cuernavaca. En esta tierra no recibió castigo. A lo mejor en el más allá le cobran que le hizo al pueblo mexicano general, y a miles de personas en particular.Amén

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