Un trabajador de parques de la ciudad de Nueva York fue acusado el miércoles de asesinato como crimen de odio después de ser acusado de disparar fatalmente a un migrante venezolano que había estado durmiendo en un patio de juegos de Brooklyn el mês pasado.
“Este acusado supuestamente llegó al lugar donde se alojaba la víctima, armado con una pistola, para ajustar cuentas”, dijo el fiscal de distrito de Brooklyn, Eric González, en un comunicado.
“Este homicidio premeditado y a sangre fría es indignante en muchos sentidos, sobre todo porque el supuesto motivo fue el odio hacia los recién llegados a nuestra ciudad”.
La acusación formal alega que Elijah Mitchell, de 23 años, de Corona, Queens, mató a Arturo José Rodríguez Marcano, de 30 años, porque estaba enojado porque inmigrantes como Marcano se quedaban en el parque infantil Steuben en Clinton Hill.
El ataque fue parte de una noche caótica que incluyó otros dos tiroteos fatales en las cercanías.
Los funcionarios del Departamento de Policía de Nueva York inicialmente le dijeron a Gothamist que creían que ambos incidentes estaban relacionados con pandillas de inmigrantes, pero la policía no ha publicado ninguna información hasta el momento que sugiera que los tiroteos estaban relacionados con pandillas.
El 18 de julio, Mitchell estaba trabajando su turno en el parque, que está a solo una cuadra de dos refugios para migrantes que albergan a casi 4.000 personas, cuando comenzó a “gritar y arrancar lonas”, dijo la oficina del fiscal del distrito.
Según se informa, Marcano confrontó a Mitchell, quien se dirigió a un vehículo y supuestamente regresó mostrando una pistola que llevaba en la cintura.
Otros empleados del parque lo apartaron, según el comunicado. El departamento de parques no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Mitchell supuestamente regresó al parque tres noches después, cuando no estaba trabajando, encontró a Marcano y le disparó en el pecho.
Marcano fue declarado muerto en el Hospital Metodista y Mitchell huyó del lugar en su auto, según la oficina del fiscal del distrito.
Apenas unos minutos después, otros dos migrantes fueron baleados cerca del refugio, en la calle Ryerson. Enny DeJesus Urbina Méndez, de 21 años, y Francisco Fuentes Rangel, de 59, murieron a causa de sus heridas.
La policía anunció más tarde que se presentarían cargos contra Jorge Said Benítez Villa, de 26 años, por ese incidente. Los tiroteos exacerbaron los temores de los inmigrantes y los residentes locales sobre la seguridad en el barrio.
Algunos de los inmigrantes que hablaron con Gothamist afuera del refugio al día siguiente dijeron que su tiempo en los refugios de la ciudad había expirado y que no tenían otra opción que dormir en el parque.
Los residentes dijeron que estaban preocupados por los problemas de calidad de vida que sentían que surgían de la gran concentración de recién llegados.
Mitchell fue procesado ante el juez de la Corte Suprema de Brooklyn, Danny Chun, quien le fijó una fianza de 350.000 dólares en efectivo y 2,5 millones de dólares en concepto de fianza.
Si es declarado culpable, se enfrenta a una pena máxima de 25 años de prisión a cadena perpetua. González dijo en un comunicado que su oficina “procesará enérgicamente este horrible caso”.
“Estos cargos incrementados envían un fuerte mensaje de que los crímenes de odio nunca serán tolerados en Brooklyn”, dijo.
El abogado de Mitchell no pudo ser contactado inmediatamente para hacer comentarios.
