La Ley FARE, que libera a los inquilinos de la ciudad de Nueva York de pagar honorarios a los corredores de bienes raíces y traslada esos costos a los propietarios, se convirtió en ley el sábado, 30 días después de su aprobación, a pesar de que el alcalde Eric Adams se negó a firmarla.
El Ayuntamiento aprobó el 13 de noviembre la Ley FARE (Intro. 360-A) con una mayoría a prueba de veto; su objetivo es liberar a los inquilinos de una importante carga económica cuando alquilan por primera vez una vivienda en la Gran Manzana, ya que los honorarios de los agentes inmobiliarios pueden ascender a varios miles de dólares.
Sin embargo, los opositores a la legislación argumentaron que esto solo trasladaría la carga de los honorarios de los agentes inmobiliarios a los propietarios, quienes de todos modos podrían pasarlos a sus inquilinos a través de alquileres más altos en una ciudad donde los costos de la vivienda siguen estando por las nubes.
Aunque se manifestó en contra de la aprobación de la Ley FARE, el alcalde Adams dijo a principios de este mes que no se opondría a que se convirtiera en ley , optando por no arriesgarse a perder la batalla con el Ayuntamiento debido a la mayoría a prueba de veto que tenía cuando se aprobó el proyecto de ley.
Según la Carta de la Ciudad, cualquier proyecto de ley aprobado por el Ayuntamiento se convierte automáticamente en ley después de 30 días si el alcalde no lo firma o veta.
Sin embargo, el alcalde Adams dijo que tenía preocupaciones sobre la Ley FARE y los posibles aumentos de alquiler que podrían resultar de ella.
“La vida determinará si mis preocupaciones eran acertadas si esto se incluye en el alquiler de los neoyorquinos cuando pagan el alquiler”, dijo Adams en una conferencia de prensa el 3 de diciembre. “No solo era un pequeño propietario, sino que también era un agente inmobiliario. Así que sé lo que es trasladar los costos a los propietarios de los edificios”.
Por otra parte, la presidenta del Concejo Municipal, Adrienne Adams, calificó el sábado la promulgación de la Ley FARE como un paso importante para mejorar la asequibilidad en Nueva York, al tiempo que criticó al alcalde Adams por “expresar una oposición de último momento” antes de su aprobación, a pesar de que los miembros de la administración de Adams habían negociado previamente los términos del proyecto de ley con la legislatura de la ciudad.
“El Consejo es coherente con su objetivo de mejorar las vidas de las familias de clase media y trabajadora, y los neoyorquinos merecen un gobierno municipal que priorice sus necesidades, no que las socave”, dijo el presidente Adams el 14 de diciembre. “La Administración participó plenamente en las negociaciones con el Consejo para garantizar la aprobación exitosa de esta ley durante todo el proceso legislativo. Esperamos plenamente que el alcalde Adams la implemente sin demora para reforzar su compromiso de apoyar a los neoyorquinos de clase trabajadora”.
Las medidas de la Ley FARE entrarán en vigor oficialmente 180 días después del sábado, aproximadamente el 14 de junio de 2025.
Una vez que lo hagan, los inquilinos de la ciudad de Nueva York podrán ahorrar miles de dólares en costos iniciales antes de mudarse a un nuevo apartamento. En promedio, en 2023, según el Ayuntamiento, los neoyorquinos gastaron $13,000 en costos iniciales de alquiler, incluidos honorarios de corredores, depósitos de seguridad, el alquiler del primer mes y otros artículos.
Más de la mitad de todos los inquilinos de la ciudad de Nueva York se consideran agobiados por el alquiler porque gastan el 30% o más de sus ingresos solo para mantener un techo sobre sus cabezas, agregó el Consejo.
Chi Ossé, miembro del Concejo Municipal de Brooklyn, fue el principal patrocinador de la Ley FARE.
“La era del inquilino cautivo puede haber terminado finalmente”, dijo Ossé. “Esta victoria nos pertenece a todos, pero debemos asegurarnos de que la Administración del Alcalde implemente y haga cumplir adecuadamente la ley después de sus desconcertantes declaraciones de último minuto que contradecían el trabajo de su administración en la negociación para apoyarla”.
