Un proyecto de ley del Ayuntamiento introdujo el miércoles llamadas para agregar etiquetas de advertencia a los alimentos o bebidas que excedan los 50 gramos de azúcar agregada.
Los menús en toda la ciudad de Nueva York pronto podrían tener una adición no tan dulce: una advertencia de azúcar.
La «Ley de la dulce verdad», un nuevo proyecto de ley del Ayuntamiento que se espera que se presente el miércoles, llama a advertir a los clientes de las cadenas de restaurantes si los alimentos y bebidas exceden la cantidad diaria recomendada de azúcar agregada, que es de 50 gramos.
El concejal Keith Powers, principal patrocinador del proyecto de ley, dijo que tales etiquetas de advertencia ayudarían a los neoyorquinos a tomar decisiones informadas sobre sus alimentos.
«A los neoyorquinos les encanta salir a comer, pero seamos honestos, no siempre sabemos cuánta azúcar estamos consumiendo», tuiteó.
El proyecto de ley es la última salva en una larga lucha de muchos funcionarios públicos de la ciudad de Nueva York contra el azúcar.
El exalcalde Michael Bloomberg y sus aliados en el Concejo Municipal provocaron la ira de muchos estadounidenses golosos cuando prohibieron las bebidas azucaradas de más de 16 onzas. Pero la llamada prohibición de las gaseosas fue rechazada definitivamente por los jueces en 2014, solo dos años después de que estallara.
El nuevo proyecto de ley de advertencia sobre el azúcar no llama a prohibir los elementos dulces del menú.
En cambio, requeriría que las cadenas de restaurantes, definidas como restaurantes con 15 o más ubicaciones en los cinco condados, agreguen un ícono de advertencia de azúcar a los elementos del menú que excedan el 100 por ciento de la cantidad diaria recomendada de azúcar agregada por la FDA.
«Tal regla también proporcionará una declaración de advertencia fáctica sobre el alto consumo de azúcares agregados», establece el proyecto de ley.
