El dictador ruso incapaz de lograr la rendición de Ucrania, con todos y sus criminales ataques, destrucción de edificaciones, hospitales y escuelas; con el asesinado de miles de personas y la fuga de millones que huyen despavoridas ante tanto horror, tampoco ha podido ganar la batalla de la información interna, para convencer a los ciudadanos rusos.
La represión contra los medios informativos
Mientras que el ejército ruso sufre miles de muertes y no logra capturar ciudades clave, Putin está intensificando su represión contra la información. El Kremlin ha cerrado los últimos tres medios de comunicación independientes de Rusia, ha prohibido las principales plataformas de redes sociales, ha creado nuevas leyes contra los periodistas que desafían su propaganda y ha insistido en llamar a la guerra una «operación militar especial».
El resultado es un público ruso con poco o ningún acceso a ninguna alternativa a la propia narrativa anti-Ucrania y anti-occidental de Putin. Es un escudo térmico para Putin contra cualquier reacción violenta a la guerra y las sanciones occidentales que han paralizado la economía de Rusia.
Arnold Schwarzenegger, el mejor propagandista
Para Estados Unidos y para la Unión Europea, es fundamental encontrar un mecanismo que permita de alguna manera informar al pueblo ruso sobre la verdad de una guerra, rechazada por el mundo entero, y presentada ante ellos, por los medios oficiales, como una odisea, como una campaña para recuperar el perdido prestigio ruso.
La pregunta ya no es «qué hacemos para detener la desinformación», dijo el ex embajador de Estados Unidos en Rusia, Michael McFaul, sino cómo promover la información dentro de Rusia. «Pregunta muy difícil», agregó.
Celebridades ya conocidas en Rusia, como Arnold Schwarzenegger, han utilizado Twitter y Telegram para compartir mensajes y videos hablando de las atrocidades de la guerra.
McFaul calificó el bit de Schwarzenegger como «brillante», y agregó: «Ese tipo de piezas, sin embargo, deberían estar sucediendo todos los días».
El presidente Volodymyr Zelenskyy se ha ganado la admiración en todo el mundo por sus discursos directos a cámara que se publican y comparten en línea. Zelenskyy, en su último discurso antes de la invasión pidiendo la paz, señaló: «Sé que no mostrarán mi discurso en la televisión rusa».
Y la Casa Blanca se reunió recientemente con personas influyentes en TikTok, una reunión que provocó algunos ojos en blanco, pero que un puñado de participantes dijeron que encontraron útil.
Todavía queda mucho por aprender de la manera cómo ha de llegarse al pueblo ruso, pero la batalla de la información tiene que ganársele al dictador Putin, incapaz hasta ahora de rendir al valiente pueblo ucraniano