Sandalia de tacón kitten con bermudas sastre
La oficina sigue siendo nuestro spot principal, así que centraremos nuestra atención en crear conjuntos deslumbrantes y cómodos, que nos permitan soportar el fuerte calor que parece derretirnos. Para ello nos inclinaremos por unas bermudas de acabado sastre para conservar ese aspecto elegante; un blazer hablará el mismo idioma, al igual que una camisa o chaleco tejido. Para terminar, sandalias de tacón, pero aquellas kitten para un detalle chic.
Sandalias flip flops con bermudas de cuero
Este es otro estilismo que fácilmente presumiríamos en una junta de trabajo. Las bermudas de cuero dan esa sensación de elegancia, mientras la camiseta renovada muestra un toque más atemporal y clásico. Terminan las sandalias de tacón con pincelazos delicados y muy estilizados.
Sandalias de plástico con bermudas elegantes
Fue difícil entender que las sandalias de plástico ya no estaban reservadas para la casa o la playa, su popularidad se extendió a tal punto que conocedoras comenzaron a llevarlas a contextos elegantes, incluso han sido vistas en la alfombra roja con Jennifer Lawrence, Olivia Wilde y Nina Ricci. Para el verano no dudes en darles una oportunidad con unas bermudas de corte sofisticado.
Sandalias T-Bar con bermudas a la cadera
No se trata de un viaje a los 2000, se trata de un look de bermudas a la cadera de Miu Miu que las capitales de la moda adoptaron con gracia. Un estilo irreverente para quien no teme en experimentar y fusionar sofisticación y desenfado. Ahora bien, si se espera portar estos pantalones cortos recomendamos aunar unas sandalias T-Bar, el equilibrio vendrá por sí solo.
Sandalias peep toe con bermudas de colores
Este es un look que fácilmente eclipsaría a la generación Z, un estilo más edgy y atrevido que invita a jugar con colores y piezas retro, como las sandalias peep toe. Este sería un atuendo que conquistaría los últimos paseos de verano ¡Ah! Y no olvides visitar la tienda vintage de tu ciudad, seguro encontrarás esta interpretación del street style.
