Desde hace varios años se ha venido adelantando todo tipo de campañas de concientización sobre la importancia de comer de manera saludable y a la lista de medidas legislativas que se han promovido en Nueva York, se espera que pronto se sume una iniciativa de ley que busca poner freno a publicidad “falsa y engañosa”, que atrapa mayormente a niños para que consuman comida chatarra.
La pieza de ley, conocida como el Acta de Prevención de la comercialización depredadora, fue aprobada esta semana por el Senado estatal, y urgen a la Asamblea que haga lo propio para que la norma pase a manos de la Gobernadora Hochul y se convierta en ley, advirtiendo que tendrá un impacto positivo en niños y jóvenes, principalmente.
Así lo destacó el senador Zellnor Myrie, promotor de la iniciativa, quien insistió en que la industria gasta miles de millones dirigiendo mensajes atractivos sobre comida poco saludable a jóvenes, afectando grandes disparidades en la salud y una esperanza de vida más corta en comunidades negras y latinas.
“Apenas el mes pasado, el Cirujano General de EE.UU. confirmó que los jóvenes son muy vulnerables a los mensajes de marketing de corporaciones, por miles de millones de dólares, y que justifica la acción del gobierno”, dijo el legislador de Brooklyn.
“Mis colegas del Senado y yo dimos un gran paso para proteger a los jóvenes del marketing depredador de una industria que ha mostrado poca consideración por la salud o la seguridad de sus productos. Las compañías de comida chatarra han invertido miles de millones en perfeccionar estrategias para dirigirse a los jóvenes, especialmente comunidades de bajos ingresos y personas de color.
El senador destaca que la industria de comida chatarra sigue comercializando de manera agresiva sus productos, ganando miles de millones de dólares y poder limitar su publicidad engañosa, salvará muchas vidas y mejorará la calidad de salud de varias generaciones.
“Si no detenemos el consumo de alimentos poco saludables para nuestros niños hoy, serán víctimas de la próxima pandemia mañana”, afirmó el político neoyorquino al referirse a su proyecto, que en la Asamblea estatal está siendo patrocinado por la asambleísta latina Karines Reyes, del condado de El Bronx.
Y es que a pesar de que la publicidad “falsa y engañosa” ya se considera es ilegal en Nueva York, según la ley estatal, la nueva normativa ampliaría ese concepto incluyendo de manera específica prohibiciones para anuncios de alimentos poco saludables dirigidos específicamente a los niños.
Asimismo, la pieza de ley busca que se amplíe la educación sobre alimentos saludables cultivados localmente para los jóvenes, a fin de aumentar su consumo y mejorar el impacto positivo de la comida sana en los más pequeños.
Datos de las autoridades de salud de Nueva York revelan que casi un tercio de los niños neoyorquinos son obesos o tienen sobrepeso, hechos que afectan directamente disparidades en la salud y el estimado de vida.
“Las investigaciones muestran que los niños son especialmente susceptibles a las tácticas de marketing porque todavía están formando sus preferencias y hábitos personales, es menos probable que practiquen la moderación y pueden convertirse fácilmente en adictos a la satisfacción inmediata de comer alimentos poco saludables“, agregó el senador Myrie.
