Rufino El Guabino

Columnistas

Ramón Velásquez Gil

Rufino era de esas personas “neutras” que uno conoce. De esas personas que siempre te dan la razón, aunque no la tengas.

– Rufino, esto es azul,  ¿verdad? le pregunta uno.

– Sii, azul esss,te responde.

– Pero, más bien tiende al verde, no te parece? le vuelve uno a preguntar.

– Humm, verde ess, responde Rufino nuevamente.

Entonces cambias al chisme:

– Maria parece que esta muy flaca, ¿verdad Rufino?.

– Jejeje flaca staa.

– Bueno pero más bien se ve como gordita, ¿cierto?

-Humm gordita staa, vuelve a responder

Ciertamente la Guabina es un pez de río muy difícil de atrapar pues es muy cauteloso.  Además posee un cuerpo cilíndrico y muy resbaladizo, lo que hace difícil agarrarlo. Tal vez esa dificultad para atraparlo, es por lo que a una persona con estas características se le denomina: Guabino.

Google define a una persona Guabina como aquella persona hábil para salir airosa de cualquier situación y que cambia interesadamente de parecer en cada ocasión.  Casi con seguridad, todos conocemos a algún Guabino.

Tengo un amigo abogado que encajaría bien en esta definición: Cuando nos cruzábamos en el camino al tribunal, me saludaba de esta manera:- Dr. Velásquez, el mejor abogado de este estado. Pero seguía su camino y al próximo que encontraba le decía lo mismo con nombre y apellido y así sucesivamente con todos los abogados que se cruzaban en el camino.

Entonces ese día había por lo menos “veinte mejores abogados del estado Miranda”, según su opinión.

¿Y en la política? bueno en la política los guabinos están como pez en el agua.

Dos políticos, uno de ellos llamado Rufino, llegaron al pueblo de Infiernito, para dar un discurso pues estaban cerca las elecciones. Ya en la tarima, el Dr. Rufino echa su discurso:

– Porque ‘pensamoooosss”, construir un puenteee para que la gente en el Infiernitooo no se moje las alpargatas al cruzar el rioooo, cuando estemos en el poder.

Ya de regreso en el carro, le pregunta su ayudante al Dr. Rufino:

– Dr ¿y de verdad le vamos a construir un puente a ese pueblo?.

El político se le queda mirando y le responde: – jejeje, pensamos. 

Y así fue pasando el tiempo hasta nuevas elecciones.

Saludos