Una organizadora laboral de alto perfil en los Estados Unidos renunció a Starbucks, diciendo que la compañía la obligó a renunciar debido a su liderazgo sindical.
Jaz Brisack, una barista que ayudó a liderar la sindicalización de una tienda en el centro de Buffalo, Nueva York, a fines del año pasado, dijo el miércoles que su último día en la empresa será el 18 de septiembre.
La votación en la tienda de Brisack inició un movimiento; desde entonces, al menos 238 tiendas Starbucks de EE. UU. han votado a favor de sindicalizarse, según la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB).
En una carta a su gerente, que Brisack compartió con la agencia de noticias The Associated Press, Brisack dijo que Starbucks se ha negado a satisfacer sus solicitudes de disponibilidad durante siete meses.
Brisack dijo que eso ha dañado la moral en la tienda, donde sus compañeros de trabajo han tenido que cubrirla cuando está ausente.
“Starbucks ha hecho que mi empleo continuo en la empresa sea imposible deliberadamente”, dijo Brisack, quien ha trabajado en la empresa durante casi dos años.
Starbucks, con sede en Seattle, dijo que trató de equilibrar las solicitudes de programación de Brisack con las necesidades de personal de la tienda. La compañía dijo que Brisack trabajaba unas 20 horas a la semana hasta mayo, cuando le dijo a la tienda que solo estaba disponible durante 6,5 horas un día a la semana. Starbucks dijo que no fue aprobado porque no satisfacía las necesidades de la tienda.
“Trabajamos para tratar a todos los socios por igual, equilibrando sus solicitudes de programación con las necesidades comerciales y de los clientes de la tienda”, dijo el portavoz de Starbucks, Reggie Borges.
Brisack dijo que su solicitud no era inusual y que muchas personas trabajan en Starbucks solo uno o dos días a la semana. Borges dijo que los horarios varían según la tienda, pero la tienda de Brisack ya tiene tan poco personal que a menudo tiene que cerrar temprano.
Starbucks no apoya el esfuerzo de sindicalización. Pero Borges dijo que ningún empleado es tratado de manera diferente o disciplinado por su apoyo a los sindicatos.
Brisack dijo que al menos 10 de sus compañeros de trabajo han sido despedidos por la empresa durante el último año. En junio, la NLRB presentó un caso ante un tribunal federal en Nueva York buscando la reincorporación de siete trabajadores prosindicales que fueron despedidos de una tienda en Buffalo.
La NLRB también acusó a Starbucks de interferir con el derecho de los trabajadores a organizarse en Memphis, Tennessee, donde la empresa despidió a siete trabajadores en febrero. Un juez federal en Memphis ordenó recientemente a Starbucks que reincorporara a esos trabajadores mientras se desarrolla el caso de la NLRB.
Pero la NLRB perdió un caso similar en junio, cuando un juez federal en Phoenix rechazó la solicitud de la agencia de obligar a Starbucks a volver a contratar a tres trabajadores.
Workers United, el sindicato que respalda la campaña de Starbucks, dijo el miércoles que presentó un cargo por práctica laboral injusta contra Starbucks en nombre de Brisack.
Brisack dijo que esperaba que la NLRB ordenara a Starbucks que la reincorporara. Mientras tanto, permanecerá en el comité de negociación de su tienda y seguirá trabajando con Workers United para organizar otras tiendas Starbucks.
