El arte de crear bienestar

El rinconcito newyorquino

Hoy les tengo una recomendación un poco fuera de la común, o tal vez no tanto, porque consiste en algo que pueden aprender a hacer y se convierta en un hobbie que incluso puedan llegar a monetizar, y saben que o sería la primera vez que le dejo ideas para que inicien un negocio.

Yendo al grano, se trata de la elaboración de jabones artesanales procesados en frío y hechos con ingredientes naturales que aportan muchos beneficios al cuerpo al igual que aceitas a utilizar, y deliciosas y duraderas fragancias.

Para mí, esta actividad es como un arte, no solo por el precioso resultado que se obtiene en la mayoría de los casos –solo gogleen para ver algunos ejemplos que les encantarán– sino por los conocimientos que se y los procesos a seguir tan cuidadosos que se deben seguir para crearlos. 

 El saber mezclar las cantidades correctas de ingredientes, conocer las propiedades de cada uno, cuál es el jabón adecuado para cada tipo de piel e incluso el simple hecho de saber utilizar cada utensilio que se requiere.

Una de las grandes ventajas de los jabones artesanales es que están libres de químicos, conservantes, colorantes o perfumes sintéticos que con el tiempo terminan siendo muy perjudiciales para la piel, así que resulta perfecto tanto para uso personal como para sus futuros clientes, si es que deciden vender en algún momento.

Anímense a asistir a esta clase de mañana en la Wave Hill House para aprender de una profesional en la materia (Melissa Rivera de Holistic Energy Healing), de 1:00 a 3:00 p.m.

Probablemente salgan de allí muy inspirados, con ganas de seguir aprendiendo otras técnicas, de descubrir más ingredientes y de compartir estos nuevos conocimientos con otras personas.

¿Qué les parece?, ¿ya han hecho jabones antes?