El remedio de los romanos para los problemas sexuales femeninos

Salud

En ocasiones resulta curioso lo desacertado que resulta el saber popular. Durante siglos, los herbolarios de medio mundo pensaron que los frutos de la planta Vitex agnus-castus eran un remedio infalible para reprimir el deseo sexual y lo indicaban para aquellas personas que, por la razón que fuera, aunque seguramente moral o religiosa, querían mantenerse castos. De ahí su nombre: “agnus castus” quiere decir en latín “cordero casto”.

El problema es que viendo los resultados de un reciente estudio realizado en la Guilan University of Medical Sciences, en Irán, lo que estaban haciendo al dar estos frutos a las personas era acrecentar aún más su deseo.

Para el estudio, titulado The 4-month effect of Vitex agnus-castus plant on sexual function of women of reproductive age: A clinical trial (El efecto de tomar 4 meses la planta Vitex agnus-castus en la función sexual de las mujeres en edad reproductiva: un ensayo clínico), se reunió un grupo de 205 mujeres sexualmente activas en edad reproductiva atendidas por ginecólogos en un centro médico universitario.

Las candidatas tenían que tener problemas sexuales y estar buscando una forma de animar su vida sexual. Ninguna de ellas podía estar utilizando píldoras anticonceptivas ni tener antecedentes de depresión, síndrome premenstrual, enfermedades graves, violencia doméstica ni problemas con el alcohol o las drogas.

Tras la selección quedaron 112 participantes que realizaron una encuesta estándar sobre sus comportamientos sexuales. Tras ellos, los investigadores le dieron a la mitad del grupo un placebo cada día, mientras que la otra mitad tomó frutos de Vitex agnus-castus (4 mg de bayas secas en polvo al día).

Después de 16 semanas, el grupo que tomaba el placebo reportó un poco menos de dolor a la hora de tener relaciones, pero ningún otro cambio. Sin embargo, las mujeres que tomaron las bayas mostraron varios beneficios sexuales que fueron estadísticamente significativos.

Entre ellos, un aumento del deseo sexual, se excitaban sexualmente más fácilmente, mayor lubricación vaginal, menos dolor relacionado con el sexo, más facilidad para llegar al orgasmo y mayor satisfacción sexual en general.

La primera mención a este fruto da idea de su importancia. Ya en el primer libro médico de la historia, ‘De Materia Medica’ escrito por el médico y herbolario griego Dioscórides, se reconoce el efecto del Vitex agnus-castus en el sistema reproductivo femenino, pero se centra en su capacidad para aumentar la producción de leche en las madres lactantes.

El médico recomendaba el uso de las hojas y las bayas para tratar problemas de lactancia, así como para expulsar la placenta y controlar el sangrado posparto.

Según Dioscórides, si una mujer experimentaba sangrado del útero, debía beber vino tinto oscuro mezclado con las hojas de esta planta.

Con el paso del tiempo, la planta adquirió la reputación de limitar el deseo sexual. En la ‘Ilíada’, Homero lo menciona como un símbolo de virginidad. En la antigua Roma, las vírgenes vestales llevaban ramas de esta planta como símbolo de su castidad.

Durante la Edad Media, su fama continuó: las flores de la Vitex agnus-castus se esparcían por el suelo ante los pies de los sacerdotes y las monjas novicias cuando ingresaban en monasterios y conventos, simbolizando su compromiso con la castidad de por vida.

Los monjes también consumían las frutas picantes para reprimir sus impulsos sexuales, lo que explica uno de los nombres comunes de la planta, pimienta de monje.

Aparte de los hallazgos del nuevo estudio, la investigación moderna ha demostrado que la Vitex agnus-castus afecta al equilibrio de las hormonas sexuales femeninas, reduciendo los niveles de estrógenos y aumentando los niveles de progesterona. Estos cambios hormonales explicarían sus efectos sexuales.

Pero esta planta también tiene otros efectos demostrados muy beneficiosos para las mujeres:

  • Síndrome premenstrual. Un análisis realizado por investigadores holandeses revisó 14 estudios sobre el uso de bayas de Vitex agnus-castus para la prevención del síndrome premenstrual.
    En un 93 por ciento de los casos (13 estudios), se encontraron beneficios. Aunque algunos de estos estudios carecían de rigurosidad metodológica, la hierba tiene posibilidades de reducir los síntomas del síndrome premenstrual.
  • Dolor mamario premenstrual. Muchas mujeres experimentan sensibilidad o dolor en los senos antes del período menstrual. Investigadores de Singapur y Australia analizaron 25 estudios y encontraron que el extracto de bayas de Vitex agnus-castus (20 a 40 mg/día durante tres meses) era efectivo para aliviar el dolor mamario premenstrual.
  • Molestias de la menopausia. Un estudio piloto realizado por investigadores australianos sugiere que las bayas del Vitex agnus-castus pueden ayudar a aliviar los sofocos y otros malestares asociados con la menopausia.
  • Lactancia. Los antiguos tenían razón en cuanto al potencial de las bayas del Vitex agnus-castus para aumentar la producción de leche. Sin embargo, los estudios han arrojado resultados contradictorios.
    Aun así, las bayas del Vitex agnus-castus parecen ser seguras cuando se utilizan según las indicaciones, por lo que las madres lactantes que deseen incrementar su producción de leche pueden considerar probarlas bajo la supervisión de sus médicos.

Cómo conseguir Vitex agnus-castus

Hoy en día, los productos derivados de la Vitex agnus-castus están disponibles en la mayoría de tiendas de suplementos y herbolarios y se suelen presentar en forma de cápsulas o tinturas. 

Hasta el momento, no se le conocen efectos secundarios graves, aunque en ocasiones puede producir algo de malestar estomacal, picazón, sarpullidos, fatiga y algo de pérdida de cabello.