Influenza estacional no había sido tan grave tan temprano en el año en más de una década

Salud

La temporada de influenza estacional se intensificó antes de lo previsto en Estados Unidos, y las hospitalizaciones por influenza estacional son peores de lo habitual para esta época del año, según los datos publicados este viernes por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés).

Hacía más de una década, desde la pandemia de influenza porcina H1N1, que las tasas de hospitalización por influenza estacional no eran tan altas a estas alturas de la temporada.

Los CDC calculan que esta temporada se han producido al menos 880.000 enfermedades, casi 7.000 hospitalizaciones y 360 muertes por influenza estacional en Estados Unidos. Esta semana se registró la primera muerte pediátrica en el país.

Según los expertos, vacunarse contra la influenza estacional sigue siendo la mejor manera de protegerse. Y el mejor momento para hacerlo es ahora.

El país está en una especie de carrera contra el virus ya que la temporada de influenza estacional comenzó al menos un mes antes de lo habitual. Y la vacuna tarda entre 10 días y dos semanas en ofrecer una protección completa.

Al igual que en años anteriores, los CDC recomiendan que la gente se vacune contra la influenza estacional antes de finales de octubre. Sin embargo, las tasas de vacunación contra la influenza estacional son más bajas de lo habitual para esta época del año.

Esta temporada se han distribuido unos 128 millones de dosis de vacuna contra la influenza estacional, frente a los 140 millones del año pasado a estas alturas y los 156 millones del año anterior, según los datos de los CDC.

Aunque la temporada actual empezó antes de lo previsto, hay motivos más que suficientes para que quienes no se hayan vacunado lo hagan ahora.

La temporada de influenza estacional estará presente al menos unos meses más. Y no se sabe si será más corta o más larga de lo habitual. Hay muy buenas razones para protegerse con la vacuna.

Y las personas vacunadas pueden seguir enfermando, pero el objetivo de la vacuna es proteger contra los resultados y las complicaciones más graves.

En general, los datos de los CDC muestran que la proporción de pruebas de laboratorio que son positivas para la influenza estacional se ha duplicado con creces en las últimas dos semanas y que la actividad de la influenza estacional es mayor en el sur. Otros datos de Walgreens que hacen un seguimiento de las prescripciones de tratamientos antivirales, como el Tamiflu, sugieren la existencia de zonas con aumento de casos en la zona de la Costa del Golfo, incluidos Houston y Nueva Orleans.

Y la temporada de influenza estacional está aumentando en medio de la oleada de virus respiratorio sincitial (VRS) que está llenando los hospitales pediátricos y de la pandemia de covid-19 en curso.

Once estados, así como las ciudades de Washington y Nueva York, han reportado niveles altos o muy altos de enfermedades respiratorias, según los CDC.