Nunca antes una mujer se había convertido en la máxima figura política del estado de Nueva York. De hecho, en la historia de los Estados Unidos, solo otras 44 mujeres llegaron a ser gobernadoras de un estado. Doce de ellas, consiguieron el puesto por haber sido vice gobernadoras y quedar en la línea de sucesión después de que el gobernador abandonara su puesto por algún motivo. Kathy Hochul es una de ellas y solo en cuestión de horas ya ha hecho historia.
Es demócrata y tiene 62 años. Desde hace varias décadas está casada con William J. Hochul Jr., abogado y empresario, con quien tienen dos hijos. Nació en Buffalo, al norte del estado, y es la segunda de seis hermanos. De familia de ascendencia irlandesa, profesa la religión católica.
Se inició en la política durante sus años universitarios, cuando estudiaba en Syracuse. Su primera acción política fue organizar un boicot estudiantil en la librería por los altos precios. Luego logró que su universidad condenara el apartheid en Sudáfrica en 1979. En 1984 se graduó como abogada de la universidad católica de Columbus.
Desde 1994 se desempeñó como miembro del comité municipal del pueblo de Hamburg, a las afueras de Buffalo. En 2003, comenzó a trabajar para la oficina del condado de Erie, para terminar liderándola en 2007.
En el año 2011 se convirtió en congresista federal representando el distrito 26 de Nueva York, tras una reñida elección. Pero cuando en 2012 volvió a la boleta los límites del distrito habían cambiado y perdió su banca.
Allí tomó un descanso de la política, en el que trabajó para la industria financiera para retornar al ámbito político en 2014 como compañera de fórmula de Andrew Cuomo. Cercana a Cuomo, algunos dudaron que su imagen tenga la fuerza suficiente como para llevar adelante al estado sin tener a Cuomo como gobernador.
Sin embargo, dos semanas atrás, cuando Cuomo anunció que renunciaría después de que se conociera un reporte de la fiscalía avalando las denuncias de 11 mujeres por agresiones sexuales presuntamente realizadas por el gobernador, Hochul dio una rueda de prensa plantando su posición como la nueva persona fuerte en la política neoyorquina.
“La promesa que le hago a todos los neoyorquinos, aquí y ahora, es que voy a pelear con furia por todos ustedes cada día de mi vida. Siempre lo he hecho, y siempre lo voy a hacer”, dijo Hochul en la primera rueda de prensa tras la noticia de que heredaría la gobernación.
Anoche, a las doce de la noche, Cuomo renunció oficialmente. De inmediato, Hochul juramentó como la gobernadora número 57 en la historia de Nueva York, en una ceremonia privada ante la jefa de jueces del estado, Janet DiFiore.
Así, además, Hochul se convertió en la primera gobernadora de Nueva York en más de cien años en no ser residente de la ciudad de Nueva York o sus alrededores. Es la segunda gobernadora en 14 años en asumir el cargo tras la renuncia de su antecesor.
Llega a la gobernación no solo en medio de un escándalo político por las denuncias contra Cuomo, pero también enfrentando a un nuevo pico de la pandemia con la variante Delta generando contagios masivos en uno de los estados que más afectados se vio el año pasado. La economía de Nueva York ha sido de las más golpeadas del país con los cierres de la pandemia, seguramente ayudar a recuperarla sea uno de los objetivos de su mandato.
