Los funcionarios de educación de Nueva York están exigiendo que las escuelas desarrollen procedimientos para notificar a los padres al menos una semana antes de los simulacros de cierre.
El cambio es parte de las nuevas regulaciones que entrarán en vigencia en 2024- 25 y que requieren que los simulacros se realicen “de una manera informada sobre el trauma, apropiada para el desarrollo y la edad”, según las reglas enmendadas adoptadas por la Junta de Regentes del estado el lunes.
Para algunos defensores y legisladores que durante años han buscado cambios en los requisitos de los simulacros de confinamiento por temor a su impacto en la salud mental de los estudiantes , las regulaciones modificadas son una medida bienvenida, pero no llegan a ser las reformas completas que buscaban los defensores.
Actualmente, la ley de Nueva York exige que las escuelas públicas realicen al menos cuatro simulacros de confinamiento cada año, una cifra que, según los críticos, se eligió de manera arbitraria.
A principios de este año, algunos legisladores presentaron un proyecto de ley que reduciría el requisito a dos simulacros, pero no se aprobó al final de la sesión legislativa.
Ese proyecto de ley incluía una serie de disposiciones relacionadas con los simulacros escolares, incluidas varias que fueron adoptadas por los regentes el lunes, como el requisito de que los padres y el personal reciban un aviso previo y que los simulacros estén informados sobre el trauma, lo que significa que eviten tácticas que puedan causar o desencadenar una respuesta traumática, como el uso de accesorios o actores para simular un tiroteo en la escuela.
Según Everytown for Gun Safety, una organización sin fines de lucro que lucha contra la violencia armada, en 2016 se habían llevado a cabo simulacros de confinamiento en el 95% de las escuelas públicas de Estados Unidos y al menos 40 estados los exigían.
La organización ha desaconsejado la realización de simulacros de confinamiento, señalando que pueden causar “consecuencias colaterales para la salud mental y el bienestar de las comunidades escolares ”.
Nueva York es uno de los pocos estados que exigen cuatro o más simulacros de confinamiento cada año, y sus estudiantes pueden experimentar en algunos casos el doble de simulacros que en otros estados, según un análisis de Trace , una organización de noticias que cubre la violencia armada.
Según las nuevas normas modificadas, las escuelas no pueden utilizar “accesorios, actores, simulacros u otras tácticas destinadas a imitar un tiroteo escolar” durante los simulacros. En el caso de las escuelas que opten por realizar ejercicios adicionales que impliquen dichos elementos, las normas modificadas señalan que no pueden realizarse en un día escolar ni involucrar a los estudiantes sin el consentimiento escrito de los padres.
Robert Murtfeld, un padre de familia de Manhattan que lleva años abogando por la reforma de los simulacros de confinamiento, dijo que las normas modificadas son “un paso enormemente positivo”.
Aunque todavía espera que los legisladores estatales reduzcan la cantidad obligatoria de simulacros y permitan a los padres optar por que sus hijos no participen, Murtfeld añadió que las normas modificadas serán muy beneficiosas en el próximo año escolar.
“Es absolutamente transformador”, dijo. “El año pasado, cuando el proyecto de ley se estancó, empezamos en septiembre sin nada. Ahora, el proyecto de ley se ha estancado, pero realmente tenemos algo bastante completo”.
