Comprensión de los términos fiscales: Ventas a plazos

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Si utiliza una venta a plazos para vender una propiedad, puede beneficiarse de un aplazamiento de impuestos y posiblemente reducir su factura fiscal total. Sin embargo, debe tener cuidado con ciertas trampas fiscales si lo hace.

Definición de venta a plazos

Generalmente, se crea una venta a plazos cuando se reciben pagos por la propiedad vendida en el año fiscal de la venta y al menos en otro año fiscal. Por ejemplo, si vende un inmueble con ganancias en 2025 y recibe pagos entre 2025 y 2028, su transacción inmobiliaria es una venta a plazos.

Implicaciones fiscales

Una venta a plazos genera un evento fiscal cada año en que recibe pagos. En el ejemplo anterior, parte de su ganancia está sujeta a impuestos en 2025 y cada año hasta 2028.

Tenga en cuenta que las propiedades que se mantienen durante más de un año califican para un tratamiento fiscal favorable sobre las ganancias de capital. La tasa impositiva actual sobre las ganancias de capital a largo plazo oscila entre el 0 % y el 20 %, en comparación con el tramo superior del impuesto sobre la renta ordinaria del 37 %.

También puede pagar todos los impuestos adeudados por la venta por adelantado, para evitar pagar impuestos sobre las cuotas en años posteriores. En algunos casos, de esta manera reducirá su factura fiscal total, aunque podría requerir ayuda con la planificación fiscal.

Beneficios de una venta a plazos

Con una venta a plazos, puede reducir el impuesto total sobre la venta de la propiedad al distribuir estos ingresos a lo largo de varios años. Además, el comprador suele pagarle una tasa de interés más alta que la de un préstamo bancario típico por el resto del monto adeudado.

Trampas fiscales en la venta a plazos

Advertencia para partes relacionadas. Si vende una propiedad a una parte relacionada y esta se enajena en un plazo de dos años, en la mayoría de los casos, el impuesto restante vence de inmediato. La definición de partes relacionadas en la legislación fiscal es más amplia de lo que se cree. Incluye:

  • Cónyuges
  • Hijos
  • Nietos
  • Hermanos
  • Padres
  • Una sociedad o corporación en la que tenga una participación mayoritaria
  • Un patrimonio o fideicomiso con el que esté vinculado

Para evitar esta importante sorpresa fiscal, considere estipular en el contrato que la propiedad no se puede enajenar en un plazo de dos años.

Potencial de recuperación de la depreciación. También tenga cuidado si depreció la propiedad en años anteriores. En algunas circunstancias, deberá pagar impuestos adicionales por dicha depreciación al venderla.

Ganancias, no pérdidas. Tenga en cuenta que el tratamiento de venta a plazos solo aplica a ganancias, no a pérdidas. Pueden aplicarse otras normas especiales, así que contáctenos si necesita asesoramiento específico para su situación.

Por supuesto, las discusiones fiscales actuales en el Congreso podrían afectar la tributación de las ventas a plazos y las ganancias de capital a largo plazo en el futuro. Si planea una venta a plazos, considere solicitar una consulta para analizar las implicaciones fiscales.

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