Una estación aérea Naval de la Segunda Guerra Mundial en la costa de Brooklyn podría albergar a más de 2.000 solicitantes de asilo después de que el presidente Joe Biden llegara a un acuerdo tentativo con la gobernadora Kathy Hochul.
El acuerdo de Floyd Bennett Field anunciado el lunes se produce después de meses de negociación con la administración Biden, aparentemente reticente a arrendar el sitio de 1.600 acres de propiedad federal en la Bahía de Jamaica.
«Una vez que se firme el acuerdo final», afirmó Hochul, «trabajaremos con el alcalde Adams y su equipo para establecer un Centro de Respuesta y Ayuda de Emergencia Humanitaria en Floyd Bennett Field».
El alcalde Eric Adams dijo que estaba agradecido por el acuerdo, aunque con una importante salvedad sobre la ayuda federal en general.
«Pero seamos claros: debido a que no hemos visto cambios significativos en las políticas que alterarían el curso de esta crisis, nos hemos visto obligados a jugar un juego insostenible de ‘golpear al topo’, abriendo un nuevo sitio tras otro a medida que avanzamos. Los solicitantes de asilo siguen llegando por miles», afirmó en un comunicado.
Hochul sugirió por primera vez el sitio, actualmente propiedad del Departamento del Interior y administrado por el Servicio de Parques Nacionales, en una carta a la Administración Biden fechada el 12 de mayo.
El Departamento del Interior planteó preocupaciones sobre la legalidad de alojar a personas en zonas verdes.
Hochul y Adams han enfrentado críticas por su manejo de una crisis en la que más de 100.000 solicitantes de asilo ingresaron a la ciudad de Nueva York el año pasado.
Durante el fin de semana, la ciudad abrió su último mega-refugio para inmigrantes: una instalación para 3.000 personas en los campos de fútbol juvenil de Randall’s Island que costará 20 millones de dólares al mes, informó el New York Post.
Floyd Bennett Field es el sitio del primer aeropuerto de la ciudad de Nueva York donde aviadores como Amelia Earhart y el productor de Hollywood Howard Hughes comenzaron sus vuelos.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Floyd Bennett Field se convirtió en la estación aérea Navel más concurrida de los EE. UU. El sitio también albergaba una fábrica de pegamento y un vertedero de basura.
Los amantes de la playa lo reconocerán como la última vista de Brooklyn antes de cruzar el puente Marine Parkway hacia el parque Jacob Riis.
Antes de la pandemia, los niños de Bed-Stuy, con la ayuda del entonces presidente del condado, Adams, iban al campo para aprender a volar.
