Mujer y Deporte

Columnistas

Jesús Elorza

El 8 de marzo se conmemora “El día Internacional de la Mujer”.  Esta fecha se utiliza para visualizar la lucha de las mujeres por su participación en la sociedad y su desarrollo íntegro como persona, en pie de igualdad con el hombre

En particular, en el deporte, podemos observar que, la mujer ha tenido que abrirse camino, a menudo, mediante hazañas épicas y enfrentándose a unas normas hechos por los hombres y para los hombres. Sirve de ejemplo a esta afirmación, lo ocurrido con Kathrine Virginia «Kathy» Switzer primera mujer en correr un maratón, prueba que estaba destinada exclusivamente a los deportistas varones, cuando en la maratón de Boston de 1967 logró, inscribiéndose como KV Switzer, partir de la línea de meta identificada con el numero 261 y llegar a cruzar la línea final después de 5 horas.

Ese día vimos a Jock Semple, comisario juez de la maratón, intentar sacar a empujones de la carrera a Kathrine Switzer por ser mujer, no pudo lograrlo por el apoyo que le dieron a la corredora otros participantes en el evento. Las gráficas de ese hecho fueron difundidas en el mundo entero y pasaron a representar un símbolo en la lucha contra la discriminación de la mujer.

La participación de la mujer en los deportes ha sido un largo camino lleno de dificultades, por ser este sector un área con predominio del hombre no solo en los eventos competitivos, sino también en la organización, dirección y gerencia del sector. La historia de los Juegos Olímpicos (JJOO) de la era moderna refleja fielmente la historia de la desigualdad y a su vez la historia de lucha de la mujer contra la discriminación.

Los Juegos Olímpicos, de la era moderna, nacen en 1896 gracias al empeño de un aristócrata y pedagogo francés, el Barón de Coubertin, que tras varios intentos convenció a los miembros del Congreso Olímpico para instaurar este evento internacional y reproducirlo cada 4 años en un lugar distinto del mundo. Los ideales olímpicos, en esos momentos, incluían la paz mundial, el hermanamiento entre los pueblos y la educación integral de la juventud, sin embargo, dejaban de lado a las mujeres. El lema “Citius, Altius, Fortius” representaba el ideal masculino en el deporte.

La mujer no tenía cabida en un mundo de hombres que desde la antigüedad venían imponiendo su concepto de superioridad. El propio Barón de Coubertin, con su falso humanismo, argumentaba que la presencia de la mujer en los estadios resultaba aberrante, contrario a la salud pública, antiestética, poco interesante e incorrecta, mostrando así un rechazo manifiesto hacia la participación femenina.

Transcurrido más de un siglo, desde que se inauguraron los JJOO de Atenas, la mujer ha transitado en el tiempo por un camino con luces y sombras, luchando para alcanzar la igualdad en el deporte. En primer lugar, para no quedar excluida de un fenómeno social que representaba la modernidad, el principio de una nueva democracia y la igualdad entre los seres humanos.

En segundo lugar, para demostrar que no es inferior al hombre, para hacer visibles su competencia y sus cualidades. Como pioneras de ese movimiento contra la discriminación podemos nombrar a:

Stamata Revithi, mujer griega que en 1896 intentó correr la maratón junto a los hombres y fue excluida. Sin embargo, en señal de protesta, corrió sola al día siguiente.

– Alice Milliat ha sido considerada la abanderada de la lucha por la inclusión de la mujer en los JJOO. Fundó la Federación Internacional del Deporte Femenino en 1921 y fue la precursora de los JJOO femeninos que se celebraron en varias ediciones, destacando las de 1930 en Praga y 1934 en Londres. Su influencia fue decisiva para que el Comité Olímpico incluyera, en Amsterdam (1928), las pruebas de atletismo femeninas en el programa olímpico.

– Charlotte «Chattie» Reinagle Cooper, fue una tenista británica y la primera mujer campeona olímpica de la historia.

Lento y duro ha sido el camino para alcanzar la igualdad de la mujer en el deporte. Una mustra de ello la vemos en el siguiente cuadro, en donde, se puede observar la diferencia de tiempo entre el debut de un deporte en la rama masculina y el tiempo de espera para ver la participación femenina:

DeporteDebut
masculino 
Debut
femenino
Años de
diferencia
Boxeo19042012108
Halterofilia18962000104
Waterpolo19002000100
Futbol soccer1900199696
Ciclismo de pista1896198892
Ciclismo de ruta1896198488
Pentatlón moderno1912200088
Remo1900197676
Hockey sobre pasto1908198072
Tiro deportivo1896196872
Lucha grecorromana1896196872
Básquetbol1936197640
Handball1936197640
Atletismo1896192832
Gimnasia artística1896192832
Esgrima1896192428
Judo1964199228
Béisbol19922012*20
Natación1896191216
Canotaje1936194812
Clavados190419128
Softbol19921996*4
Tenis189619004
Tiro con arco190019044

En el deporte venezolano, cabe destacar el papel de las mujeres en su permanente accionar por lograr derribar los muros de la discriminación y la desigualdad de condiciones con respecto al hombre. En esa historia podemos citar a una serie de atletas que jugaron un destacado papel en abrir las puertas de la actividad deportiva para permitir el ingreso masivo de mujeres en distintas edades que hoy concurren a los escenarios deportivos.

Entre las pioneras del deporte contemporáneo podemos citar a: Josefina Navarro, Ursula Selle y Belkys Leal en esgrima. Cristina Egui en tenis, Gisela Vidal, Sheila Leiva, Benilde Ascanio y Dalia Quintero en atletismo, Carmen Teresa Brea y Mery Tenorio en voleibol, Ana y María Victoria Carrasco en esquí acuático, Luisa Alvarado, Mercedes Díaz y Yubirí González en baloncesto, Analiesse Rockemback y Esther Capriles  en natación, Mercedes de García en Tiro, Flor Isava en ecuestre, Amalia Hernández en ajedrez, Natacha Hernández en judo, Carmencita Hernández, Gloria Alfonzo, Gregoria Torres y Zuleima Cirimele en softbol, Tiziana Petrangeli, Any y Luna Woyzechowsky, Pilar de Segui y Carmen Cabrera en gimnasia.

Todas ellas y muchas otras que, escapan a mi memoria, lograron con su esfuerzo y dedicación abrir el camino del deporte a los miles de personas de diferentes edades que hoy participan del deporte como atletas, entrenadores, personal de apoyo o dirigentes deportivos.

El largo camino de las dificultades para las mujeres en los deportes está lejos de llegar a su etapa final. Hoy vemos el surgimiento de nuevos problemas que suscitan un debate permanente en el mundo deportivo.La inclusión de las mujeres transgénero en las competiciones deportivas femeninas, es una cuestión compleja en la que han de conciliarse el derecho a la identidad y a la no discriminación de las deportistas y el juego limpio, entendido como la igualdad de oportunidades de las participantes.

El debate está encima de la mesa y es objeto de fuertes polémicas. La profundidad del debate es tal que lleva a cuestionar incluso la concepción binaria del deporte, aquella que divide la competición en las categoríashombre-mujer.

No hay soluciones únicas: hay quien aboga por negar la participación de las deportistas trans en competiciones femeninas al considerar que tienen superioridad física y dejan en desventaja a sus compañeras y quien solicita la integración de toda aquella persona que se sienta mujer.

En el medio, voces que piden un estudio caso por caso y otras que sugieren superar las categorías sexuales en pro de otras divisiones más afinadas que tengan que ver con la talla o el peso. En fin, un problema latente que hay que resolver bajo el principio de la no discriminación.