La gobernadora Kathy Hochul promulgó una legislación el jueves con el objetivo de ayudar a los servidores públicos a obtener alivio de los préstamos estudiantiles para que puedan concentrarse en sus carreras, no en sus deudas.
“Solo en este estado se cancelarán $16,300 millones en deuda estudiantil”, dijo Hochul durante la conferencia de prensa del 15 de septiembre.
“Eso es borrón y cuenta nueva, eso significa que los neoyorquinos pueden reconstruir sus vidas. Más de 2,2 millones de neoyorquinos verán algún tipo de alivio y eso les cambiará la vida”.
Hochul habló sobre cuántos servidores públicos sienten un llamado a ayudar a los demás y, a menudo, rara vez obtienen beneficios de su decisión de dedicar sus vidas al servicio.
Desde 2007, ha habido un programa de condonación de préstamos de servicio público.
“En Nueva York, este programa ha ayudado a los trabajadores elegibles a recibir un promedio de $61,000 en alivio de la deuda estudiantil. Esto es de vital importancia, y este alivio de la deuda está exento de impuestos, siempre lo ha estado y siempre lo estará. Entonces, si está enseñando a la próxima generación de nuestros hacedores y pensadores, si está manteniendo nuestras calles seguras, si está sirviendo en nuestro ejército, está ayudando al gobierno a funcionar sin problemas, si es un trabajador de la salud que gastó tiempo en las profundidades del infierno durante esta pandemia, esos $61,000 son dinero real”.
La deuda de préstamos estudiantiles en los Estados Unidos ha crecido exponencialmente en los últimos años y ahora es una de las formas más grandes de financiamiento al consumo en este país.
“A finales de 2020, unos 43 millones de estadounidenses debían casi 1,6 billones de dólares en préstamos estudiantiles federales. Aproximadamente $90 mil millones de esa deuda pendiente la deben 2,4 millones de neoyorquinos. Estamos muy endeudados, la matrícula está superando la capacidad de pago de los estudiantes y la proporción de estudiantes que solicitan préstamos para financiar sus títulos también ha aumentado drásticamente. Cuando el gobierno federal está dormido al volante, los estados deben dar un paso al frente para proteger a [sus] estudiantes prestatarios”.
El asambleísta Harvey Epstein también estuvo en el evento y aplaudió a Hochul por priorizar la legislación de alivio de la deuda estudiantil y hacerla más accesible.
“Entendemos la lucha de las personas que completaron la educación superior y el costo de ir a la escuela. Más de medio millón de servidores públicos hoy son elegibles para esta condonación de préstamos y potencialmente millones más una vez que la gobernadora firme este proyecto de ley», dijo Epstein.
Solo el 2% de los neoyorquinos califican para la condonación de préstamos, hoy estamos aquí para cambiar eso.
Las personas tienen hasta el 31 de octubre para solicitar retroactivamente este alivio.
Lo que les estamos diciendo a los educadores, enfermeras, defensores públicos y organizadores comunitarios que se endeudaron para ir a la universidad es que tienen la oportunidad de perdonar esa deuda al establecer pautas claras y eliminar la confusión que han sido barreras para esta inscripción”.
