A medida que envejecemos, nuestros cuerpos enfrentan numerosos desafíos, incluido un deterioro en la función del sistema inmunológico y una mayor vulnerabilidad a diversos problemas de salud. Recientemente, un estudio innovador arrojó luz sobre estos desafíos y reveló una posible solución que podría tener implicaciones de gran alcance para las personas que envejecen.
El papel de las células madre hematopoyéticas en la función inmune.
El proceso de envejecimiento suele ir acompañado de una disminución del funcionamiento adecuado de los sistemas hematopoyético e inmunológico, lo que hace que los adultos mayores sean más susceptibles a infecciones, trastornos sanguíneos e incluso al desarrollo de tumores.
El estudio publicado el 31 de agosto de 2023 en la revista Nature Aging, dirigido por Nicola Vannini, líder de grupo en el Departamento de oncología UNIL-CHUV en Lausana (CH) y miembro de la rama de Lausana del Instituto Ludwig para la Investigación del Cáncer, se centró en un actor clave en el sistema sanguíneo: las células madre hematopoyéticas (HSC).
Estas células son responsables de generar varios tipos de células sanguíneas y desempeñan un papel fundamental en el mantenimiento de un sistema inmunológico saludable.
A medida que envejecemos, las HSC experimentan una disminución en su capacidad para regenerar sangre y muestran preferencia por un tipo específico de linaje celular, lo que contribuye a la disfunción del sistema inmunológico.
Revelando la conexión mitocondrial
Sin embargo, los investigadores descubrieron una solución notable. Al introducir un compuesto natural llamado urolitina A, que se dirige a las mitocondrias (las fuentes de energía de las células), pudieron revertir la disminución de la función de las HSC. Se identificaron anomalías de las mitocondrias como un factor que contribuye al envejecimiento de las HSC. La urolitina A actuó como un modulador mitocondrial, restaurando eficazmente la función mitocondrial dentro de las HSC.
Las urolitinas no se encuentran en los alimentos; sin embargo, sus precursores sí lo son. La urolitina A es el resultado de la transformación de los ácidos elágicos y los elagitaninos por la microflora intestinal de los seres humanos. Los elagitaninos se encuentran en las granadas, las nueces y algunas bayas.
Resultados prometedores en ratones que envejecen
El hallazgo más interesante de este estudio preclínico fue que esta intervención no solo rejuveneció la capacidad de reconstitución de la sangre de las HSC más antiguas, sino que también mejoró la función del sistema inmunológico en ratones de edad avanzada.
Cuando se incorporó la urolitina A como suplemento dietético, no sólo revitalizó los compartimentos linfoides del sistema inmunológico sino que también mejoró el rendimiento general de las HSC.
Esto se tradujo en una respuesta inmune mejorada contra las infecciones virales, lo que demuestra el potencial de la urolitina A para combatir el deterioro del sistema inmunológico relacionado con la edad.
Implicaciones para el futuro
En esencia, esta investigación innovadora indica que al fomentar el reciclaje de las mitocondrias utilizando urolitina A, es posible revertir el proceso de envejecimiento dentro de los sistemas hematopoyético e inmunológico.
Estos hallazgos son inmensamente prometedores para el desarrollo de intervenciones dirigidas a abordar las condiciones de salud relacionadas con la edad en personas mayores y allanan el camino para imaginar ensayos clínicos.
