Trae tus botas o zapatos resistentes y participa en Paerdegat Basin Park

El rinconcito newyorquino

MARF

Recuerdo que desde muy niña me interesaba hacer voluntariado; me imaginaba llevando donaciones a personas de escasos recursos económicos, eliminando basura de áreas verdes, colaborando en algún refugio de animales u otras acciones de este tipo.

Para mí, hacer algo positivo por el mundo en el que vivo, siempre fue una meta que comencé a cumplir con frecuencia al entrar en la universidad.

Mi carrera, me puso un poco más fácil el camino para involucrarme en labores sociales que no solo beneficiaron a quienes recibían la ayuda que yo prestaba, sino también a mí misma gracias a los cientos de aprendizajes que obtuve.

Sentirme útil, poner a prueba mis capacidades, conectar con comunidades, entender la diversidad cultural y sentir la satisfacción de salvar vidas, son otras de las ganancias que tendré de por vida.

Hacer voluntariado es una práctica preciosa que puedes realizar incluso desde la comodidad de tu casa.

Tal vez el área social no sea la tuyo, pero, por ejemplo, la naturaleza también necesita que se le echen unas cuantas manitas y ese es un buen punto de partida.

Afortunadamente, en New York, a diario se realizan este tipo de actividades que tienen como uno de sus principales objetivos fomentar la consciencia de los participantes por cuidar el mundo en el que viven.

Si estás interesado en unirte a alguna, una buena opción sería registrarte para participar en la restauración de las áreas boscosas en Paerdegat Basin Park.

Allí aprenderás especialmente “la importancia de la diversidad de especies para la salud del ecosistema” y puedo asegurarte que te irás de allí muy complacido.

Lleva tus “botas o zapatos resistentes, pantalones largos y ropa que se pueda ensuciar”, y no olvides la mejor actitud.

¿Ya han hecho voluntariado antes? ¿qué es lo que más les gusta de hacerlo?

@nycparks