Algoritmo detecta la esquizofrenia a partir de una huella dactilar con un 70% de fiabilidad

Salud

Investigadores de Fidmag Hermanas Hospitalarias y del Área de Salud Mental del Ciber (Cibersam) han probado la fiabilidad del uso de las huellas dactilares como marcador del riesgo de padecer esquizofrenia. El equipo investigador ha desarrollado para ello un algoritmo para detectar la patología a través de inteligencia artificial.

La investigación, publicada en la revista Schizophrenia Bulletin, ha demostrado que mediante el uso de ese algoritmo avanzado se alcanza una fiabilidad del 70% a la hora de discernir entre huellas dactilares de enfermos con esquizofrenia y de personas sanas. 

Esto indica, según los investigadores, que el uso de la huella dactilar como marcador de riesgo de la patología puede ser una herramienta fácil de usar y fiable, tanto para detectarla de forma instantánea como para determinar su futura aparición, dado que los patrones dermatológicos, una vez formados, son estables a lo largo de la vida.

El método consiste, primero, en escanear los dedos de los individuos. En concreto, el modelo que empleó simultáneamente imágenes de los dedos pulgar, índice y corazón de la mano izquierda fue el que alcanzó una mayor precisión (un 70%). Acto seguido, se lleva a cabo un procesamiento de las imágenes obtenidas mediante el algoritmo -que tardaron un año en desarrollar- que determinará las probabilidades de riesgo de padecer la enfermedad analizando patrones de alta complejidad.

Las huellas dactilares, marcador del neurodesarrollo temprano

La principal hipótesis sobre el origen de la esquizofrenia apunta a alteraciones de origen genético y ambiental producidas durante el desarrollo prenatal y/o en los primeros años de vida. Las huellas dactilares se consideran un marcador del neurodesarrollo temprano por el hecho de tener un origen embrionario común con el sistema nervioso central, desarrollándose conjuntamente durante las mismas semanas de gestación.

Según los autores del estudio, si se produce alguna afectación de origen ambiental o genético en el embrión durante la gestación, esta también se puede traducir a nivel de la piel, traduciéndose en cambios en los patrones de las huellas dactilares. 

Los autores del estudio dejan claro que el hecho de tener la marca en la huella dactilar no significa que la persona tenga que desarrollar la patología de manera irremediable, sino que debe haber un detonante que ponga en marcha esa predisposición del individuo.

En la actualidad, frente a un primer brote psicótico, los psiquiatras deben esperar seis meses para saber si el episodio ha sido debido a una esquizofrenia o, por ejemplo, a un trastorno bipolar.  Con esta nueva herramienta se podría llegar a acortar ese tiempo de diagnóstico y poder así iniciar el tratamiento antes. 

La nueva herramienta todavía no está disponible para su uso clínico, ya que es necesario hacer más estudios de validación