Cientos de trabajadores sociales, educadores y padres se solidarizaron con la Federación Unida de Maestros (UFT, por sus siglas en inglés) para una manifestación y una conferencia de prensa el viernes afuera de Tweed Courthouse exigiendo que el Departamento de Educación salve los programas de la primera infancia y reincorpore a casi 400 coordinadores de instrucción (IC, por sus siglas en inglés) y trabajadores sociales que fueron “excedidos” en septiembre.
La UFT está preocupada por lo que ven como el desmantelamiento de la educación de la primera infancia, uno de los logros políticos característicos del exalcalde Bill de Blasio, y también está pidiendo un voto de censura a la Vicerrectora de Educación de la Primera Infancia, la Dra. Kara Ahmed.
Los trabajadores de la primera infancia dicen que Ahmed, quien supervisa los programas de cuidado infantil y Pre-K for All en el Departamento de Educación, engañó al concejo municipal cuando testificó bajo juramento en una reunión del comité del Concejo Municipal en octubre, afirmando que todos los coordinadores de instrucción todavía estaban en sus puestos papeles
Sin embargo, los trabajadores sociales de la primera infancia y los coordinadores de instrucción recibieron avisos de exceso dos días antes del nuevo año escolar, el 6 de septiembre, informándoles que fueron despedidos de sus puestos actuales pero que podrían postularse para otros trabajos en el DOE.
Según la información que la UFT compartió en la manifestación, fuentes anónimas le dijeron al sindicato que el Dr. Ahmed les dijo a los líderes de la primera infancia del distrito que los coordinadores de instrucción “se irían a mediados de año”. Y a principios de esta semana, alega la UFT, un superintendente adjunto les dijo a los maestros que los IC y los trabajadores sociales no regresarían al salón de clases.
Raúl García, líder del capítulo de trabajadores sociales y psicólogos de la UFT, dijo que el programa Pre-K for All había sido uno de los mejores programas de su carrera porque los estudiantes estaban recibiendo el apoyo que necesitaban.
“Desde que llegó el nuevo liderazgo, especialmente el 6 de septiembre, la nueva vicerrectora tomó decisiones y parece que realmente no entiende el programa”, dijo García.
García también señaló que los niños que ingresan a prekínder son “bebés pandémicos”.
“Todos estos niños realmente necesitan más apoyo social y emocional ahora más que nunca”, dijo García.
Los asistentes a la manifestación refutaron comentarios anteriores hechos por funcionarios del DOE y del Departamento de Educación Infantil (DECE) de que la mayoría de las veces trabajan en una oficina en lugar de trabajar directamente con estudiantes y maestros.
En una conferencia de prensa el 3 de noviembre, el canciller del DOE, David Banks, comentó que “no entendía por qué los trabajadores sociales tendrían problemas para estar más cerca de los niños”.
Los IC suelen pasar el 95 % de su tiempo apoyando a los estudiantes y profesores en el aula, según la UFT. Observan a los maestros y los ayudan con planes de lecciones y actividades apropiadas para su edad.
Con la afluencia de más de 5000 niños migrantes, señaló el sindicato, los IC con el programa bilingüe podrían resultar fundamentales para el éxito del ‘Proyecto Open Arms’, un plan de apoyo educativo para familias que buscan asilo.
