La jaula del Tigre y los derechos humanos

Columnistas

Ramón Velásquez Gil

Ciertamente, este no iba a ser el título de este artículo. El título original se iba a referir a los Derechos Humanos en la actualidad. Pero es sabido que la gente normalmente no muestra mucho interés sobre estos temas. Entonces cambié el título por lo que sería la parte final del artículo.

Ahora bien, dependiendo de la cultura de que se trate, se tendrán en cuenta, en mayor o menor grado los derechos humanos.

Por ejemplo, en el mundo musulmán casi no existen los derechos humanos y menos cuando se trata de personas del sexo femenino, a quienes esta religión le niega cualquier tipo de derechos.

Por otra parte, en la doctrina comunista tampoco existen los derechos humanos y solo los toman en cuenta cuando hipócritamente los utilizan para hacer propaganda a su favor. Pero en general, el mundo comunista se lleva por delante cualquier principio sobre derechos humanos.

Es ya del conocimiento publico, lo que están haciendo los rusos en la guerra contra Ucrania con sus nuevos reclutas, sin casi ningún entrenamiento, los envían en grupos de diez, contra las fortificadas líneas ucranianas custodiadas estas por cientos de soldados, solo para que estos les disparen y los maten y así saber los comandantes de donde salen los disparos. Generalmente, no regresa ninguno de los diez enviados cada hora. Hubo un día en que murieron seiscientos noventa reclutas de los setecientos enviados en grupos de Diez.

Me comentaba un compañero de trabajo cubano, que cuando joven fue reclutado en Cuba para enviarlo a la guerra de Angola, África y que los llevaron a un campo de entrenamiento solo para tomarles una foto con el uniforme y de allí, montarlos en un avión y enviarlos a la guerra. Claro, lo más importante para el gobierno cubano era que le cobraban diez mil dólares al gobierno de Angola por cada soldado cubano.

Me cuenta el amigo que, cuando él vio aquello se fugó junto con otros y zarparon a Miami en una balsa a remos. Y lo más impactante, según se puede leer en internet y que realmente nos ha regresado a la época de los romanos, es lo que ocurre en algunos de los carteles de la droga.

Como se sabe, ellos se pelean por ser unos más sanguinarios que otros.Y es así entonces cómo algunos carteles han puesto de moda el tener grandes jaulas con tigres de bengala hambrientos, para echarles los cuerpos de la gente que ellos castigan por traición y así desaparecerlos.

Se tienen noticias de que, últimamente, han optado por tirarles las personas aún vivas, para mayor sufrimiento de las mismas.

No soy partidario de esta barbaridad, pero los países civilizados, no obstante de qué han creado tecnologías para dar menos sufrimiento a  los reclusos condenados a muerte, deberían tener jaulas de estas para la ejecución de algunos que de verdad se lo merecen y de aquellos sobre los que la gente piensa que, ningún castigo sería suficiente.

Saludos