Una nueva investigación sugiere que tener presión arterial alta y colesterol LDL elevado a una edad temprana puede aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca, incluso si estos factores se controlan más adelante en la vida.
Controlar la presión arterial y los niveles de colesterol puede ser una prioridad baja para muchos adultos jóvenes.
Sin embargo, un nuevo estudio sugiere que es posible que los jóvenes quieran prestar más atención a estos factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares, ya que pueden afectar la salud del corazón más adelante.
La investigación, publicada el 20 de diciembre en PLOS One, analizó el colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL) de 136.648 participantes, la presión arterial sistólica (PAS) de 135.431 participantes y la enfermedad coronaria (CHD) de 24.052 individuos para determinar si el LDL y la PAS impactado el riesgo de enfermedades cardíacas a lo largo de la vida.
Después de analizar los datos, los científicos descubrieron que tener niveles más altos de PAS y LDL a una edad más temprana (55 años o menos) se asociaba con un mayor riesgo de enfermedad cardíaca.
Es más, este riesgo se mantuvo elevado incluso si los participantes redujeron sus niveles de PAS y LDL en el futuro.
Los investigadores sugieren que estos hallazgos respaldan la importancia del control de los factores de riesgo durante toda la vida en individuos jóvenes, ya que el riesgo de enfermedad cardiovascular se acumula a lo largo de la vida.
Además, los autores del estudio dicen que se necesita más énfasis en el tratamiento de adultos jóvenes con niveles altos de LDL y PAS para reducir sus posibilidades de desarrollar enfermedades cardíacas a medida que envejecen.
¿Deberían los más jóvenes tomar medicamentos para reducir el colesterol y la presión arterial?
Si bien el estudio destaca la necesidad de controlar el LDL y la PAS en los jóvenes, los científicos señalan que tratar a personas de este grupo de edad con medicamentos para reducir el colesterol y la presión arterial puede generar preocupaciones sobre la seguridad, ya que pocos estudios han examinado el uso de estos medicamentos en adultos jóvenes.
Por ejemplo, en una revisión de la investigación realizada en 2022, los investigadores concluyeron que se necesitan más estudios para aclarar la mejor manera de reducir los niveles de LDL en personas más jóvenes.
Además, un estudio de 2019 publicado en Hypertension señaló que se desconoce la seguridad y eficacia de la terapia antihipertensiva entre adultos jóvenes, principalmente debido a la falta de ensayos aleatorios.
Aún así, los informes sugieren que una persona puede ayudar a reducir su presión arterial siguiendo una dieta saludable, perdiendo peso si tiene un IMC alto, reduciendo el consumo de sal y haciendo ejercicio con regularidad. Limitar el consumo de alcohol y no fumar también puede reducir la presión arterial.
Los métodos naturales para reducir el colesterol incluyen tomar niacina, aceite de pescado y esteroles vegetales.
Los cambios en la dieta, como seguir un plan de alimentación saludable para el corazón o la dieta de Cambios Terapéuticos en el Estilo de Vida (TLC, por sus siglas en inglés) también pueden ayudar a reducir el colesterol.
Sin embargo, los jóvenes con colesterol y presión arterial elevados deben hablar con su proveedor de atención médica para desarrollar un plan de tratamiento adecuado para estos y otros factores de riesgo de enfermedad cardíaca.
