Los datos de un sondeo llevado a cabo por el Centro de Investigaciones Pew indican que un alto porcentaje de latinos adultos consideran que el gobierno federal no ha realizado un trabajo adecuado para enfrentar al fenómeno migratorio en la frontera limítrofe con México.
La organización con sede en Washington se enfocó en medir el punto de vista de 5,140 adultos estadounidenses, incluidos entre ellos 879 hispanos.
De esta manera, se determinó que 74% de los adultos latinos estadounidenses están convencidos que el gobierno federal realiza un mal trabajo al abordar la situación en la frontera sur.
Sin embargo, el 81% de los ciudadanos no latinos consultados comparten el mismo punto de vista.
Con respeto a lo que se debería poner en marcha para frenar a las olas de inmigrantes proyectadas una vez que inicie la primavera, el 57% de los latinos cree que la situación fronteriza mejoraría si a los solicitantes de asilo se les permitiera trabajar mientras surge una respuesta del gobierno a su solicitud; en tanto que sólo el 44% de los no latinos opina lo mismo.
Es de llamar la atención que, únicamente el 33% de los latinos, piensa que, incrementando las deportaciones de quienes permanecen en el país sin la documentación correspondiente, el problema migratorio podría mejorar.
En contraparte, el 55% de los no latinos parece estar de acuerdo en que las deportaciones resultan una opción viable para marcarle un precedente a otras personas interesadas en ingresar al país sin la documentación correspondiente.
Otra opción que descartaron los encuestados como recurso para hacerle frente a la inmigración está relacionada con el muro fronterizo, pues el 43% de los latinos descartó que ampliar la barrera para impedir el cruce de personas de manera terrestre desde México a Estados Unidos, serviría muy poco.
Finalmente, el 48% de los no latinos considera que imponerles sanciones más severas a las empresas dedicadas a contratar a personas sin la documentación debida para hacerlas trabajar en Estados Unidos produciría una disminución en el número de inmigrantes; en tanto que el 28% de los latinos no lo consideran así.