Mermelada de melocotón

Sabores

Te damos la bienvenida a tu espacio Sabores, en esta ocasión les mostrare como preparar esta sencilla receta.

Ingredientes

  • 1 kg de melocotones
  • 400 g de azúcar
  • Medio limón

Preparación

Antes de nada vamos a lavar muy bien 1 kg de melocotones maduros. Una vez lavados, los dejamos escurrir. Pelamos los melocotones y descartamos el hueso. Alrededor del hueso hay mucha pulpa de melocotón, así que usaremos un cuchillo de puntilla para sacar toda esa pulpa que podamos de cada melocotón.

Una vez desechados los huesos y la piel de los melocotones, los cortamos en trozos muy pequeños. Estos deben ser de un tamaño regular para que se cocinen todos por igual.

Este paso lleva tiempo si queremos hacerlo bien, pero si os resulta más cómodo, podéis hacer trozos más grandes y triturar la mermelada una vez preparada. Nosotros encontramos que con
los trocitos de melocotón, queda una textura muy agradable, con pequeños tropezones.

Pesamos los melocotones en trocitos, ya sin la piel ni los huesos y, en nuestro caso, nos quedan 875 g. Deberíamos añadir la mitad de este peso en azúcar pero para que no resulte muy dulce la mermelada, nosotros hemos reducido un poco esa cantidad y le hemos puesto 400 g.

Además, añadimos el zumo de medio limón antes de cocinar la mermelada. Cocinamos la mezcla de melocotón, azúcar y limón unos cinco minutos a fuego fuerte.

Cuando comience a hervir, bajamos a fuego suave y seguimos cocinando entre 35 y 45 minutos. Transcurrido este tiempo, observaremos que la mezcla ha reducido a la mitad, ha espesado y tiene
brillo, así que la retiramos del fuego.

Comprobamos que la mermelada está en su punto poniendo un poco en una cuchara. Esperamos que se enfríe y hacemos un surco en el medio con un dedo. Si la mermelada no vuelve a juntarse y se mantiene el surco que habíamos hecho, estará en su punto.

Guardamos la mermelada mientas esté caliente en un tarro y cuando haya enfriado, la pasamos a la nevera hasta el momento en el que la vayamos a consumir.

Esta mermelada es perfecta para degustar en el desayuno, sobre una tostada o para rellenar pasteles o magdalenas.