¿Puedo beber alcohol mientras estoy amamantando?

Salud

Por el bien del bebé y de los padres, lo más seguro es no consumir alcohol durante la lactancia. Sin embargo, este no es siempre el deseo de un padre lactante. La seguridad de consumir alcohol y amamantar depende en gran medida del patrón de consumo de alcohol de los padres lactantes.

Más de una bebida alcohólica estándar al día se considera un consumo de alcohol moderado y muy desaconsejado.

Por esta razón, la Academia Estadounidense de Pediatría recomienda que los padres que amamantan limiten su consumo de alcohol y no beban dos horas o menos antes de amamantar.

De acuerdo con las Pautas dietéticas para estadounidenses, una bebida estándar es de 12 onzas de cerveza al 5 %, 8 onzas de cerveza al 7 %, 5 onzas de vino al 12 % o 1,5 onzas de licores destilados al 40 %.

La investigación sobre la seguridad y los riesgos del consumo de alcohol a menudo no es concluyente, sesgada o poco clara porque es un desafío desarrollar un estudio ético de alto nivel que aborde el alcohol y los niños.

Riesgos del consumo de alcohol para el bebé

Según la investigación, incluso cantidades bajas de alcohol, una o dos bebidas, pueden disminuir la ingesta de leche de un bebé entre un 20 y un 23 %. Esta pequeña cantidad de ingesta de alcohol también se asocia con agitación infantil temporal y sueño de mala calidad.

Sin embargo, los efectos adversos a largo plazo del consumo ocasional de alcohol, como una bebida diaria, no son concluyentes. La investigación ha mostrado resultados mixtos con respecto a los resultados de salud a largo plazo en los niños.

Algunos estudios han demostrado que cantidades significativas de consumo de alcohol, más de una o dos bebidas al día durante la lactancia, se asocian con complicaciones más graves para el bebé y el niño, que incluyen:

  • Deterioro del crecimiento y la función motora del bebé.
  • Sedación infantil
  • Retención de líquidos
  • desequilibrios hormonales
  • Déficit de razonamiento en la infancia

Otros riesgos del consumo de alcohol

El consumo de alcohol está asociado con una disminución del suministro de leche y cambios potenciales en el sabor de la leche que pueden no gustarle a su bebé. El consumo excesivo de alcohol a diario parece disminuir el tiempo que la madre lactante decide amamantar.

También es esencial considerar el impacto físico, neurológico y psicológico del consumo excesivo de alcohol y la capacidad de los padres que amamantan para cuidar a su bebé bajo la influencia.

Prueba de leche

Las tiras reactivas de etanol para la leche materna ya están disponibles y se han convertido en un producto popular para los padres. El mercado de consumo está lleno de varios fabricantes y múltiples vías de compra.

A pesar de los múltiples fabricantes, todas las tiras reactivas funcionan de manera similar. La tira reactiva está saturada con una pequeña cantidad de leche materna extraída o extraída. Se produce un cambio de color en función de la cantidad de alcohol presente en la leche. Para una prueba precisa, es importante seguir las instrucciones y esperar el tiempo completo para la saturación y los resultados.

Seguridad y fiabilidad

Hasta la fecha, ningún estudio científico confiable ha verificado la precisión y confiabilidad de las tiras reactivas de alcohol para la leche materna. Las tiras reactivas para leche se comercializan como un producto de consumo, no como un producto médico, lo que indica que no se han sometido a pruebas rigurosas de precisión y confiabilidad.

Internet está lleno de «experimentos» personales con resultados mixtos. Algunos padres verificaron la precisión de las tiras reactivas basándose en cómo se sintieron neurológicamente después de consumir alcohol y lo que revelaron las tiras reactivas sobre el contenido de etanol de su leche.

Otros padres sintieron que las pruebas se «retrasaron» porque la leche dio positivo en alcohol mucho después de que se sintieran neurológicamente normales y normalmente eligieran amamantar. El uso de tiras reactivas de leche es una elección de los padres, pero es esencial ser consciente de la falta de pruebas de su fiabilidad.

Consejos para los padres que optan por consumir alcohol

Hay algunas estrategias que puede usar para limitar la exposición de su bebé a la leche materna contaminada con alcohol:

  • Espera a beber. Evite el alcohol en las primeras seis semanas posparto, ya que la lactancia materna es frecuente. Espere a beber hasta que el suministro de leche y el horario de alimentación estén más establecidos.
  • Alimentar antes de beber. Antes de consumir alcohol, alimente a su bebé y/o extraiga su leche materna.
  • Comer. Consumir alcohol con la comida.
  • Prueba. Considere utilizar tiras de prueba de leche para su tranquilidad.
  • Bombear y tirar después de beber. Esto no disminuirá el nivel de alcohol en la sangre o la leche materna, pero puede brindarle tranquilidad saber que no está alimentando con leche contaminada con alcohol.

Si está amamantando y le gustaría consumir alcohol, asegúrese de hacerlo con moderación. Siga algunos consejos, como alimentar antes de beber, para ayudar a garantizar su seguridad y la de su bebé. Si siente que tiene un problema con el consumo de alcohol, o conoce a alguien que lo tenga, especialmente durante la lactancia, no dude en comunicarse con su proveedor de atención médica, quien puede indicarle los recursos disponibles.