En en 10 años se registraron más de 3 millones de casos de extranjeros ‘inadmisibles’ a USA

Migración

En los últimos 10 años el gobierno federal no ha permitido el ingreso de más de 3 millones de extranjeros por sus puertos de ingreso por razones de inadmisibilidad, decisión discrecional que ejercen los agentes de inmigración.

Una visa estampada en el pasaporte “no garantiza la entrada” a Estados Unidos. Así lo advierte el libro ‘Inmigración, las nuevas reglas’, una guía de Univision publicada en 2017 que permanece vigente. Y a pesar de que muchos afirman lo contrario, un reciente informe revela que en más de 3 millones de veces los agentes federales de inmigración han declarado ‘inadmisible’ a un extranjero en las fronteras.

Esa es la conclusión de un reciente informe del Centro de Información y Acceso de Registros Transaccionales (TRAC) de la Universidad de Syracuse, en Nueva York. “Nuevos datos arrojan luz sobre lo que sucede con las personas que son declaradas inadmisibles en los puertos de entrada de Estados Unidos”, señala.

De acuerdo con lo estipulado en la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA), todo extranjero que llega a un puerto de entrada (terrestre, aéreo o marítimo) debe ser “inspeccionado por oficiales de la Oficina de Operaciones de Campo (OFO) empleados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) antes de que se les permita ingresar al país”.

Estados Unidos cuenta con poco más de 300 puertos de entrada terrestres, marítimos y aéreos.

Los investigadores del TRAC hallaron, con base en la revisión de datos que, como resultado de esta inspección (admisión y entrada legal a Estados Unidos), durante la última década los agentes de la CBP que trabajan en los puertos de entrada han determinado que en más de 3 millones de veces las personas que se encontraban ante ellos eran “inadmisibles” porque carecían de la autorización adecuada para ingresar al país.

Una persona pudo haber registrado una o más determinaciones de inadmisibilidad. Por esa razón el informe menciona casos y no inmigrantes.

El servicio e inmigración explica que algunas de las causas de inadmisibilidad a Estados Unidos son por: razones de salud, actividad delincuencial, seguridad nacional, probabilidad de convertirse en carga publica, falta de certificación laboral, fraude o haber rendido una declaración falsa.

Los investigadores del TRAC revelaron además que “la cantidad de inadmisibles ha variado a lo largo del tiempo”. Y que tras la toma de posesión del expresidente Donald Trump (20 de enero de enero del 2017) se registró una caída y una segunda por la pandemia del coronavirus cuando comenzaron las expulsiones expeditas bajo del Título 42 del Código de Estados Unidos.

Este año, hubo un aumento y se se registraron 54,212 extranjeros inadmisibles en el mes de abril. “La mayoría de las personas consideradas inadmisibles eran adultos”, dice el TRAC. Sin embargo, agrega, “había otras 418,000 personas que formaban parte de unidades familiares y 98,000 adicionales que se trataba de menores (niños) no acompañados”.

“Los ciudadanos canadienses y mexicanos constituían el mayor porcentaje de personas consideradas inadmisibles, pero los ciudadanos de Filipinas y Cuba también se ubican entre los primeros” (declarados inadmisibles), agrega.

Cuando la persona es declarada inadmisible en un puerto fronterizo, “la decisión no es apelable”, explica Alex Gálvez, un abogado de inmigración que ejerce en Los Ángeles, California. “Este tipo de decisiones son discrecionales y no se pueden rebatir. La persona es automáticamente regresada” (expulsada).

“En muchas de las situaciones donde un agente del CBP niega la entrada a un inmigrante por motivo de inadmisibilidad, esa interacción entre el oficial y el extranjero técnicamente no sucede, no se registra una custodia formal. Por esa razón no se puede apelar”, agrega.

Ahora bien, si la declaratoria de inadmisibilidad ocurre por medio de una ‘decisión formal’, es decir cuando se ha registrado una custodia formal, esa decisión sí es apelable ante una Corte de Apelaciones”, indica.

canadienses y mexicanos constituyen “un gran porcentaje de los que podían retirarse voluntariamente”. Sin embargo, los canadienses representaron un porcentaje más pequeño de las personas “a las que se ordenó formalmente la deportación, mientras que los mexicanos constituyeron el porcentaje más grande de esos casos, seguidos por los nacionales de Colombia, Guatemala, Haití y Venezuela”.

“Otros fueron rechazados por otros motivos sin penalización, incluidas 73,000 personas que fueron expulsadas inmediatamente de los puertos de entrada en virtud del Título 42”, precisa.

El reporte agrega que, durante la última década, excluyendo a los miembros de tripulación, “un poco más de la mitad (53%) de los detenidos tras haber sido declarados inadmisibles “finalmente pudieron ingresar al país”.

La forma más común para que alguien que es inadmisible en un puerto de entrada ingrese a Estados Unidos “es a través de lo que se llama «libertad condicional», un beneficio migratorio que a menudo se otorga “por razones humanitarias o de política pública”.

Y si bien estas personas no fueron admitidas formalmente, “se les permitió ingresar y permanecer temporalmente en Estados Unidos”, agrega el reporte.

Finalmente, el TRAC señala que, durante mucho tiempo, los cubanos tendieron a ser la mayoría de las personas en libertad condicional en el país. Después de este grupo se ubican mexicanos y canadienses, considerados los grupos más grandes de personas en libertad condicional.

En cuarto y quinto lugar, muy cerca de los canadienses, se ubican inmigrantes originarios de Ucrania e India.