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Hablando de lugares pintorescos y agradables para comer, no puedo dejar de recomendarles el maravilloso Fresco by Scotto que, con su toque fancy, se ha convertido en uno de los restaurantes semiformales favoritos de muchos, inclusive de celebridades.
Desde que abrió sus puertas en 1993 bajo el mando de la familia Scotto, este lugar solo ha aumentado su calidad y reconocimiento en diversas revistas de cocina y famosos programas de televisión pero, especialmente, entre los neoyorquinos.
Sé que está mal suponer que solo por tratarse de un restaurante italiano la comida es exquisita y la atención como si fueras parte de la familia pero, al menos en este caso, ese prejuicio se cumple y qué bueno que así sea.
No hay nada como recibir una albóndiga alla toscana, un plato de cualquiera de sus pastas con el toque justo de Parmigiano Reggiano y una summer salad con la misma calidez que aun invitado especial en un almuerzo familiar.
La atención al detalle en Fresco by Scotto se extiende desde las recetas hasta la decoración del lugar que con sus tenues luces, colores pastel y tierra de piso a techo y sencillas pero elegantes mesas, crean el ambiente perfecto para cualquier tipo de reunión donde la comida sea el elemento más importante después del motivo del encuentro, por supuesto.
Y no hay que olvidar su área exterior bellamente decorada con enredaderas, plantas colgantes y flores de vivos colores que nos da la ilusión de estar comiendo en una especie de jardín mágico –bueno, así me gusta imaginarlo–.
Sin duda visitar Fresco by Scotto es una experiencia maravillosa que deben intentar alguna vez; espero que lo disfruten tanto como yo.
Por favor, háganme saber si conocen otros rinconcitos de este estilo.
IG: @frescobyscotto
